La antorcha olímpica emprende su travesía hacia Francia a bordo del emblemático velero 'Belem', en un acto simbólico que representa la unión entre la historia y la modernidad. Este acontecimiento marca el inicio de un recorrido lleno de significado y emoción, que llevará el fuego sagrado a tierras francesas en preparación para los próximos Juegos Olímpicos. El velero 'Belem', con su majestuosa presencia y su legado histórico, se convierte en el vehículo perfecto para transportar la llama olímpica, destacando la importancia de la tradición y la innovación en este evento deportivo de relevancia mundial. Un hito que une pasado y presente en un viaje que trasciende fronteras y une a los pueblos en torno al espíritu olímpico.
Emotivo viaje del Belem con la antorcha olímpica hacia los Juegos París
El Belem, histórico velero francés de tres mástiles, zarpó esta mañana del puerto de El Pireo, cerca de Atenas, y comenzó a navegar hacia Francia con la llama de los Juegos Olímpicos de París 2024 a bordo. Se espera que el velero llegue el próximo 8 de mayo a Marsella, donde comenzará el recorrido de la antorcha, por relevos, a lo largo del territorio francés, y llegará a París el próximo 26 de julio, coincidiendo con la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos.
“Es una emoción muy grande”, declaró en esta ocasión Tony Estanguet, presidente del comité organizador de los JOP, que había recibido simbólicamente la llama la víspera en Atenas, de manos del presidente del comité olímpico helénico, Spyros Capralos. “Ahora la vamos (la llama olímpica) a traer de vuelta a Francia con este barco, el Belem, que también data de 1896, ¡qué coincidencia tan fantástica!”, añadió.
La llama olímpica, encendida el 16 de abril en Olimpia, fue entregada a los organizadores franceses ayer viernes durante una ceremonia en el Estadio Panatenaico de Atenas. Ahora debe llegar a Francia, donde llegará el 8 de mayo vía Marsella, ciudad fundada por los griegos alrededor del año 600 a.C.
Antes de eso, el domingo, el barco viajará a través del Canal de Corinto, una hazaña de ingeniería del siglo XIX construida con el aporte de bancos e ingenieros franceses. Antes de entrar en el Puerto Viejo, el Belem desfilará en el puerto de la ciudad focense y estará acompañado por 1.024 embarcaciones. Está previsto entretenimiento en tierra y en el mar durante todo el día.
Al día siguiente comenzará el relevo olímpico en la ciudad, con paradas previstas en la basílica de Notre-Dame de la Garde o en el Stade Vélodrome. El propio Estanguet anunció ayer que el nadador Florent Manaudou sería el primer portador de la llama olímpica a su llegada a la ciudad de Marsella.
Luego cruzará el país, visitando en particular las Antillas y la Polinesia Francesa, hasta París, donde el 26 de julio tendrá lugar la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos.
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