En la reciente jornada futbolística, La Liga española se vio sacudida por una serie de penaltis sorprendentes que capturaron la atención de los aficionados. Desde el inesperado error de Budimir que dejó perplejos a los seguidores del Mallorca, hasta el despiste de Gerard Moreno que sorprendió a los fanáticos del Villarreal, los momentos de máxima tensión se vivieron en las áreas de penalización. Estas situaciones, que a menudo se consideran oportunidades doradas para los equipos, se convirtieron en protagonistas de una jornada llena de emociones y giros inesperados. Los penales, tan decisivos en el fútbol moderno, demostraron una vez más su capacidad para generar drama y controversia en cada encuentro.
Errores insólitos desde el punto de penalti: Budimir y Gerard Moreno sorprenden
Si complicado es ver una jugada como la que protagonizó Ante Budimir en el alargue del partido de este pasado lunes en el encuentro que enfrentó a su equipo, Osasuna, al Valencia en El Sadar, tampoco es habitual lo que sucedió en San Mamés con Gerard Moreno y el Villarreal. Las dos tienen en común que se produjeron en sendos lanzamientos desde el punto de penalti. Y ambos acabaron por no subir al marcador.
Penaltis inéditos: Budimir entrega el balón y Moreno choca con el poste
En Pamplona, Budimir se disponía a intentar empatar para su equipo en el minuto 97 cuando se hizo un lío al acercarse al balón y acabó entregándoselo mansamente al guardameta del Valencia, Giorgi Mamardashvili. Más tarde, su entrenador, Jagoba Arrasate, explicó primero que el croata había estado jugando con un golpe en las costillas. Más tarde, se confirmó que tenía tres rotas e incluso tuvo que ser hospitalizado.
En San Mamés, Gerard Moreno ejecutó el lanzamiento, pero lo ajustó tanto que el balón pegó en el palo y volvió hacia su posición. Quizás por instinto, el delantero volvió a rematar acertando esta vez con el gol. Sin embargo, la acción fue anulada.
La regla en los penaltis es clara. El lanzador no puede tocar dos veces seguidas el balón a no ser que el rechace venga de otro jugador, como por ejemplo el portero. Al no ser el poste futbolista, Gerard no podía volver a rematar. Sí hubiera podido hacerlo su compañero Santi Comesaña, que venía por detrás, pero Moreno se lo impidió.
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