En el mundo de la belleza y el cuidado personal, siempre hemos buscado el secreto para mantener una piel radiante y saludable. Muchas veces nos hemos enfocado en productos cosméticos, tratamientos faciales y rutinas de cuidado personal, pero ¿qué pasa si el camino hacia una piel hermosa y joven radica en algo más profundo? ¿Qué pasa si el sexo es la clave para desbloquear el secreto de la piel radiante? En este artículo, exploraremos la relación entre el sexo y la salud de la piel, y cómo esta práctica puede ser fundamental para mantener un cutis hermoso y saludable.
- El secreto de la piel radiante: ¿el sexo es la clave para un cutis saludable y hermoso?
- Favorece su hidratación
- Disminuye el acné
- Evita la aparición de arrugas
- Ayuda a eliminar toxinas
- Previne ojeras
- Se eleva la autoestima
- Ayuda a dormir mejor
- Se fortalece el sistema respiratorio
- Se queman calorías
- Se fortalece el suelo pélvico
- Se benefician los huesos y la musculatura
- Mejora la salud del cerebro
- Disminuye el estrés
El secreto de la piel radiante: ¿el sexo es la clave para un cutis saludable y hermoso?
El sexo brinda muchos beneficios para la salud en general. Sin embargo, un dato que pocos conocen es que también ayuda a mejorar el aspecto de la piel. Una vida sexual activa y satisfactoria aumenta la frecuencia cardíaca y puede llegar a quemar 300 calorías por hora, algo que estimula la microcirculación de la piel y oxigena los tejidos, según explican los especialistas.
Por lo tanto, los encuentros íntimos no solo tienen consecuencias positivas en lo emocional sino también en el cutis de nuestro cuerpo. A continuación, te contaremos en profundidad cómo contribuye el sexo en la salud y apariencia de la piel:
Favorece su hidratación
Las relaciones sexuales favorecen el control de los niveles hormonales, promoviendo así la producción de colágeno, lo que ayuda a mantener una piel hidratada, luminosa y saludable.
Disminuye el acné
La práctica regular de sexo placentero contribuye a la regulación de las hormonas, lo que mantiene el control de esta afección cutánea.
Evita la aparición de arrugas
La serotonina, la oxitocina, la dopamina y la prolactina son hormonas encargadas de brindar sensación de felicidad, placer y bienestar, lo cual ayuda a reducir el estrés y provocar la regeneración de las células. Esto evita y retrasa las arrugas que suelen ser uno de los primeros signos del envejecimiento.
Ayuda a eliminar toxinas
El aumento de la temperatura corporal que provoca el sexo causa la eliminación de toxinas, que mejoran el aspecto de la piel del rostro y el cuerpo.
Previne ojeras
Las hormonas de oxitocina y prolactina son liberadas durante y después del acto sexual, las cuales favorecen el descanso y ayudan a conciliar el sueño, evitando así la aparición de ojeras.
Además de estos beneficios en la piel, el sexo también tiene otros efectos positivos en el cuerpo:
Se eleva la autoestima
La actividad sexual frecuente promueve la producción de endorfinas, neurotransmisor que estimula la creatividad y mejora tu estado de ánimo.
Ayuda a dormir mejor
El orgasmo disminuye los niveles de dopamina, hormona del placer, pero se incrementan los de prolactina, por lo que es normal tener una sensación de satisfacción y somnolencia tras el acto sexual.
Se fortalece el sistema respiratorio
Tener sexo una o dos veces por semana aumenta los anticuerpos que protegen de las enfermedades respiratorias.
Se queman calorías
Estudios de la Universidad de Montreal señalan que esta práctica ayuda a adelgazar y controlar el peso.
Se fortalece el suelo pélvico
Mantener relaciones sexuales es bueno para el suelo pélvico ya que fortalece su musculatura.
Se benefician los huesos y la musculatura
El sexo promueve la producción de testosterona que favorece el crecimiento de la masa ósea y muscular.
Mejora la salud del cerebro
Una vida sexual activa a lo largo de los años ayuda a mejorar la función cognitiva y mantener una buena memoria.
Disminuye el estrés
Un estudio comprobó que mantener relaciones sexuales estimula la liberación de oxitocina y reduce el nivel de cortisol en sangre, la hormona del estrés.
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