Especialistas recomiendan un enfoque saludable para la alimentación para reducir el riesgo de cáncer, sin sacrificar el placer de disfrutar de los ali

Especialistas recomiendan un enfoque saludable para la alimentación para reducir el riesgo de cáncer, sin sacrificar el placer de disfrutar de los alimentos favoritos

La alimentación es un aspecto fundamental en la prevención del cáncer. Según especialistas en la materia, adoptar un enfoque saludable en la dieta puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Sin embargo, esto no significa que debamos renunciar a disfrutar de nuestros alimentos favoritos. De hecho, la clave está en encontrar un equilibrio entre la salud y el placer. En este sentido, los expertos recomiendan consumir alimentos frescos y naturales, limitar el consumo de grasas y azúcares, y optar por métodos de cocción saludables, como el asado o la cocción al vapor. De esta manera, podemos disfrutar de una alimentación equilibrada y reducir el riesgo de cáncer, sin sacrificar el placer de disfrutar de nuestros platos predilectos.

Cumple tus deseos de salud: descubre el secreto para reducir el riesgo de cáncer

La alimentación es un gran pilar para el bienestar de nuestra salud, física y emocional. Sin embargo, algunos malos hábitos nutricionales no solo afectan a corto plazo, sino que además repercuten en el desarrollo de futuros problemas de salud, como enfermedades cardíacas e incluso cáncer.

En España, los datos de la Red Española de Registros de Cáncer revelan un incremento preocupante en las cifras de tumores en el país: se estima que este 2024 podría alcanzar los 286.664 nuevos casos. Por tal razón, cobra importancia ser conscientes de que, en gran parte, lo que comemos influye en nuestro futuro.

Alimentación saludable, clave para prevenir el cáncer: consejos de expertos

La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) acaba de lanzar una nueva guía de alimentación, elaborada en colaboración con nutricionistas de Futurlife21. En ella se prioriza una nutrición adecuada que apunta a reforzar la prevención del desarrollo de tumores relacionados con nuestros hábitos de alimentación.

La nueva guía de la AECC busca que los españoles consuman más verduras y productos naturales, sin dejar de lado el disfrute. Conoce cuáles son las principales pautas que proponen los expertos y ayudaría a reducir el riesgo de cáncer en un 18%.

Disfruta de los alimentos naturales y reduce el riesgo de cáncer: la nueva guía de la AECC

La nueva guía de la AECC busca que los españoles consuman más verduras y productos naturales.

Principales beneficios de la nueva guía de alimentación contra el cáncer

Las pautas de la nueva guía de alimentación contra el cáncer que propone la AECC, apuntan a un tipo de dieta antiinflamatoria, enfocada a equilibrar la microbiota, potenciar la función del sistema inmunitario y prevenir el desarrollo de enfermedades como el cáncer.

La inflamación es una condición silenciosa que afecta a nuestro sistema inmune y hace que éste no pueda reaccionar eficazmente a las agresiones externas o bien no pueda identificar células cancerosas. Por lo tanto, tener un sistema inmune equilibrado ayuda a que, básicamente, nuestro organismo tenga herramientas para defenderse.

Cómo comer para prevenir el cáncer

Los parámetros propuestos en la nueva guía de la Asociación Española Contra el Cáncer, ayudaría a reducir el riesgo de cáncer en un 18%. Estas son las características generales que debes tener en cuenta:

1. Aumenta el consumo de productos naturales

Una prioridad de la AECC es que se aumente el consumo de productos naturales. Estos deberían representar entre un 80 y 90% de lo que comemos. La idea es priorizar las verduras y proteínas magras (que contienen una baja cantidad de grasa y colesterol), y limitar el consumo de carnes rojas y productos procesados, como los embutidos.

Asimismo, es necesario incorporar carbohidratos complejos (legumbres, quinoa, harinas integrales, avena) y grasas saludables (aceite de oliva, aguacate, frutos secos o semillas), ricas en omega 3 que es importante para reducir la inflamación.

2. Come nutritivo y saludable

Una cosa es comer sano y otra cosa es que además sea nutritivo. Comer pan integral es saludable, pero si a esto no le añades verduras o frutas, por ejemplo, te faltarán nutrientes esenciales. La clave es comer equilibrado.

Según nutricionistas, un plato perfecto debería tener 50% de verduras, 25% de hidratos de carbono buenos, y otro 25% de proteína magra natural y grasas saludables.

3. Come varias veces al día

Si bien está de moda el ayuno intermitente. Este tipo de dieta no es para todo el mundo. Lo recomendable es comer según la necesidad de tu cuerpo. Pueden ser 3 o 5 comidas diarias.

Lo importante es que no te gane el hambre y comas alimentos poco nutritivos y saludables, que además pueden favorecer un pico de azúcar en la sangre. Lo ideal es priorizar alimentos naturales sin azúcar añadida.

4. Evita los ultraprocesados

Estos alimentos son ricos en azúcares, en grasas saturadas vegetales y en harinas refinadas. En particular, distintas evidencias científicas indican extremar el consumo de la carne roja procesada, como los embutidos.

5. Limita las bebidas alcohólicas

Sobre todo en verano, tendemos a calmar la sed tomando una cerveza. Este es un gran error, pues las bebidas alcohólicas deshidratan y además inhiben la enzima antidiurética, lo que aumentará las ganas de orinar.

Por lo tanto, lo más recomendable es hidratarse con agua, nada de bebidas dulces que tienen azúcar o edulcorantes y favorecen las condiciones inflamatorias.

Esta información no sustituye en ningún caso al diagnóstico o prescripción por parte de un médico. Es importante acudir a un especialista cuando se presenten síntomas en caso de enfermedad y nunca automedicarse.