El orgullo de 'la otra Real' y un mensaje de liderazgo.
En un histórico partido disputado en el estadio de Anoeta, la Sociedad Deportiva Eibar, apodada como la 'otra Real', logró un trascendental triunfo que no solo supone un gran avance en la lucha por la permanencia, sino que también envía un fuerte mensaje de liderazgo a los rivales de la competición. La victoria, lograda gracias a un espectacular gol anotado en el minuto 88, supone un inYEcción de moral para el equipo vasco, que ahora se encuentra más cerca de alcanzar su objetivo. La valentía y determinación demostradas por los jugadores del Eibar son un ejemplo a seguir para cualquier equipo que busque salir adelante en momentos de adversidad.
La Real 'alternativa' lucha por la Europa League con un mensaje de liderazgo
No es la Real que era ni en juego ni en resultados, pero sigue viva en la pelea por la Europa League, mérito incontestable en esta campaña tan compleja.
La Real alternativa, la liderada por Turrientes, en la que Becker le puso el picante ofensivo y Aramburu fue MVP tampoco pudo deshacer el ritual de lo habitual de perder en cancha del Barcelona, este curso Montjuïc, siempre el Camp Nou.
Con medio equipo tipo liquidado por las lesiones o la fatiga, bastante hicieron los txuri urdin con mantenerse vivos hasta el descuento.
Imanol Alguacil impone un cambio y la Real 'B' lucha por la sexta plaza
Imanol, en vistas de que se presenta una semana decisiva y que los dos próximos encuentros son ante rivales directos, dio un meneo a su equipo y pergeñó una nueva fórmula, con cambio de sistema e identidades.
Puso Imanol junto a Le Normand y Pacheco en el eje a un Aritz que no era titular desde enero y por la derecha a un Traoré que salía de lesión, pero no se atrevió con un Tierney tierno por su reciente y enésima dolencia.
Lo llamativo fue ver a Jon Mikel Aranburu en la banda contraria con la misión más compleja del choque: neutralizar a Lamine Yamal. Lo paradójico es que fue el mejor y lo logró, pese a ese gol del crack en transición tras un saque de banda mal ejecutado.
Turrientes fue el más entonado de una medular completada por un Merino decepcionante y un Brais que funcionó a chispazos. Arriba, Oyarzabal, de nuevo irrelevante, y Becker, inmenso en su tarea de romper a la espalda, más discreto en las definiciones.
Esa Real que se recitaba de carrerilla en el pasado otoño es ahora un equipo alternativo, con Kubo y Barrene en el banquillo por segundo partido consecutivo y Zubimendi y Zubeldia neutralizados por sus lesiones. Imanol se guardó al pivote para el jueves y quizá el domingo.
El azkoitiarra no volverá hasta agosto.
Cero minutos de los arietes
Pero lo más impactante y sangrante de todo es que, en la 35ª jornada, ante el Barça en su cancha, con la posibilidad -luego ratificada- de perder el sexto puesto, André Silva y Sadiq Umar gozaron de cero minutos. Rosco de los arietes llamados a marcar diferencias. Imanol no es dado a lanzar mensajes con sus decisiones, pero ésta es un cohete en la línea de flotación. No son ni titulares, ni alternativos.
Tres de los cinco refuerzos del pasado verano fueron suplentes y solo Traoré jugó de salida. Refuerzos, sustantivo del verbo reforzar. Temporada de Champions.
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