En el marco de una temporada que prometía ser emocionante, el club ha sufrido un revés inesperado en el campeonato, cayendo derrotado en un partido clave. El entrenador del equipo, Vicente Moreno, ha hablado con nuestra redacción sobre la dura caída y ha expresado su frustración y decepción ante el resultado. En una entrevista exclusiva, Moreno ha analizado los errores cometidos por su equipo y ha reconocido que la derrota duele mucho. A continuación, te presentamos las palabras del entrenador, quien nos habla sobre lo que salió mal y qué medidas tomará para revertir la situación.
Derrota en casa: Vicente Moreno lamenta el 1-2 ante Betis
El entrenador de Osasuna, Vicente Moreno, expresó su frustración tras caer por 1-2 ante el Betis en un partido con muchas ocasiones en el estadio El Sadar.
Los primeros 25 minutos han sido mejores. Pero a partir de ahí, hemos sido mucho mejores que ellos, hemos tenido ocasiones suficientes, más cuatro que tres, bastante claras, dijo el técnico valenciano sobre la derrota ante un Betis que aprovechó su momento para hacer el 1-2 definitivo.
La lesión de Lucas Torró
Sobre la salida de Lucas Torró del terreno de juego, Moreno señaló: Se llevó un buen golpe en la cabeza. El doctor ha pedido el cambio e imagino que será más el susto y el momento. Estamos en los minutos finales y, teniendo la posibilidad de cambio, había que hacerlo.
Análisis de la derrota
Hemos visto muchos momentos y acciones a balón parado que nos podían haber dado alguna opción de gol. Hemos dominado esa faceta, pero luego está la defensiva, que es donde hemos recibido, comentó sobre el gol encajado que no les permitió lograr el empate.
La resignación de Moreno
El técnico mostró su resignación: Era bonito ganando hoy, que hemos podido hacerlo. A veces te ponen los pies en el suelo y te paran. Hay que darle valor. Cuesta muchísimo ganar un partido en Primera División.
La derrota duele mucho, pero no nos rinde, aseguró Moreno, quien reconoció que la derrota es dura, pero que no se rinden.
Osasuna cae ante Betis en un partido que podrían haber ganado, pero que finalmente se les escapó de las manos.
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