Un Nadal con dos caras desliza a tierra en Roma con un susto
El tenista español Rafael Nadal, número uno del mundo, vivió un momento de intenso terror en la ciudad eterna, Roma, durante el partido de cuartos de final del Masters 1000 de Roma. En un encuentro que parecía tener el rumbo marcado hacia una victoria fácil, Nadal se vio obligado a sobreponerse a un susto mayúsculo que puso en vilo a la afición. Afortunadamente, el mallorquín logró recuperarse del susto y seguir adelante con su partido, aunque el episodio no pasó desapercibido y generó un gran revuelo en las redes sociales.
Rafa Nadal vuelve a ser el rey de tierra batida en Roma
Rafa Nadal sigue afinando su puesta a punto en la temporada de tierra batida. El balear dio este jueves un paso más en su camino hacia Roland Garros con una sufrida victoria en su debut en el Masters 1000 de Roma.
Se impuso por 4-6, 6-3, 6-4 al belga Zizou Bergs en un partido en el que no necesitó demasiado tiempo para imponer su superioridad. Tras unos primeros juegos de transición, el exnúmero 1 fue acelerando para lograr el break en el cuarto juego.
Firme con el servicio y más agresivo desde el fondo de pista que en el Godó o en Madrid, Nadal arrancaba con fuerza, dejando claro que su intención era mandar sobre la pista y no dar opciones a su rival.
Sin embargo, una sucesión de errores no forzados permitió a Bergs recuperar la rotura y posteriormente poner el 3-3 en el marcador. La reacción del belga no acabó ahí. Cada vez con más confianza, fue asentándose sobre la pista y aprovechando los excesivos errores de un Nadal cada vez más nerviosos y errático.
Un segundo break en el noveno juego le puso a Bergs el primer set en bandeja, y no falló. En blanco cerró un enorme primer parcial en el que se benefició de los errores y la falta de confianza de Nadal, que se fue al vestuario con un pobre bagaje de 3 golpes ganadores y 16 errores no forzados.
Punto de inflexión
El descanso le vino bien al español, que comenzó bien un segundo parcial marcado por el golpe de calor sufrido por un espectador en el primer juego y que obligó a parar el partido durante más de diez minutos.
Por suerte, todo quedó en un susto y el juego se pudo reemprender con normalidad. y con mejores sensaciones para Nadal. La pausa le sirvió para serenarse y verlo todo con más claridad, todo lo contrario que su joven rival, a quien las dudas comenzaron a llevar por el mal camino.
Un cómodo break en el segundo juego le permitió abrir brecha en el marcador, una distancia que esta vez sí fue capaz de mantener Nadal hasta el final. Los constantes intentos de reacción de un combativo Bergs fueron contenidos por el campeón de 22 títulos de Grand Slam, mucho más experimentado en este tipo de situaciones, como demostró en el noveno juego, cuando salvó dos bolas de break para acabar cerrando el set por 6-3.
Todo quedaba en el aire para el tercer set, con la incógnita de qué Nadal veríamos, el fallón de la primera manga o el sólido y fiable de la segunda.
Las dudas se despejaron enseguida. La mejor versión del exnúmero 1 del mundo se mantuvo en el Foro Itálico para alegría de un entregado público que jaleaba con pasión cada acción de mérito del diez veces campeón en Roma.
Un break en el tercer juego marcó el principio del fin para Bergs que, pese a seguir luchando hasta el final, se veía cada vez más desbordado por el tenis dominante de un Nadal cada vez con más confianza.
Tras superar un delicado 0-40 con 3-2 en el marcador, Nadal puso la directa hacia una victoria que le mete en segunda ronda, donde se las verá el sábado con el polaco Hubert Hurkacz, séptimo cabeza de serie, y con quien sorprendentemente nunca se ha visto las caras pese a los muchos años que llevan coincidiendo en el circuito.
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