Título de la noticia: Pinchar 4 km antes de la meta ha sido un drama para Evenepoel
En una jornada que parecía estar siendo perfecta para el ciclista belga Remco Evenepoel, un inesperado pinchazo a tan solo 4 kilómetros de la meta ha cambiado por completo el rumbo de la competencia. El joven corredor, que hasta ese momento lideraba la carrera con gran autoridad, se ha visto obligado a detenerse y cambiar la rueda, lo que le ha costado valiosos minutos y, muy probablemente, el triunfo. La mala suerte se ha cruzado en el camino del líder del equipo Deceuninck-Quick Step, que ahora tendrá que asimilar este golpe de azar y prepararse para la próxima etapa.
El sueño hecho realidad: Evenepoel logra doblete de oro en París
El belga Remco Evenepoel, doble campeón olímpico de contrarreloj y ruta en los Juegos de París, vivió un momento de gran drama y luego de gran alegría al lograr su segundo título de oro en una semana.
Del pinchazo a la gloria. A solo 4 km de meta, cuando marchaba escapado, Evenepoel sufrió un pinchazo que parecía arruinar sus posibilidades de ganar. Sin embargo, la rápida reacción del ciclista de Aalst le permitió continuar y alcanzar el objetivo.
Ha sido un drama. Estar casi seguro de ganar a falta de 4 km y luego pinchar una rueda no ayuda a aliviar el estrés y la emoción del momento, pero menos mal que la reacción fue rápida y pude continuar, señaló Evenepoel en la meta de Trocadero.
Un triunfo más, pero muy especial
Este triunfo es muy especial para Evenepoel, de 24 años, quien ya cuenta con 58 triunfos como profesional, entre ellos los Mundiales de crono y ruta, la Vuelta a España y dos Liejas.
Ganar dos medallas de oro en París es un sueño hecho realidad, una vez más. He conseguido todo lo que quería conseguir este mes, terminar tercero en el primer Tour de Francia y el doblete de oro. Mi temporada no puedo describirla, dijo emocionado.
La clave del triunfo
Sobre el desarrollo de la carrera, Evenepoel se encargó de animarla desde lejos con sus habituales arrancadas, pero el campeón sabía que la clave estaba en los tres ascensos a Montmartre.
Me puse a la ofensiva. Sabía que Montmartre no era la subida que realmente me convenía, pero me lancé a fondo en cada repecho e intenté mantener la estabilidad. Al final fue suficiente, así que ¿qué puedo decir?, concluyó.
Con este doblete de oro, Evenepoel confirma su condición de ciclista de élite y se consolida como uno de los grandes favoritos para futuras competiciones.
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