Título de la noticia: El Camino del Sueño, ¿un paraíso para motociclistas o un infierno de siniestralidad en México?
La ruta conocida como El Camino del Sueño, que conecta la ciudad de Mazatlán con la de Durango, se ha convertido en un destino turístico popular para los amantes de las motos. Sin embargo, detrás de la emoción y la aventura que ofrece este trayecto, se esconde una realidad alarmante. La siniestralidad en esta ruta es cada vez más frecuente, convirtiendo lo que debería ser un paraíso para los motociclistas en un infierno de accidentes y tragedias. En este artículo, exploraremos las razones detrás de esta situación y analizaremos las medidas que se deben tomar para garantizar la seguridad de los conductores que recorren este camino.
La isla de Tenerife, un destino de moteros, pero también un tramo peligroso para la siniestralidad
No imaginas cuál es la provincia que concentra el mayor número de puntos negros para moteros en sus carreteras, y es que seguramente ni te lo has planteado. Es el lugar más peligroso para circular en moto de toda España, la zona con mayor número de puntos negros para las dos ruedas, y no es un mito urbano, ya que la misma Dirección General de Tráfico lo confirma.
Y es que en las estadísticas que ofrece la Dirección General de Tráfico, se contabilizan nada menos que 18 tramos de alto riesgo para las motos. Hablamos de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, en las Islas Canarias, y más concretamente de la isla de Tenerife, un paraíso para el turismo y para disfrutar en moto de sus incontables tramos de curvas y puertos de montaña los 12 meses del año.
Es una isla de incontable belleza, paisajes extraordinarios y un clima que siempre es bondadoso durante todo el año, y si a ello añades muchas curvas es terreno abonado para las motos. Pero, contrariamente a lo que se puede pensar, esta extensa lista de puntos negros no está relacionada directamente con asfalto en mal estado, zonas mal señalizadas o a que la DGT no haga bien su trabajo.
Estos puntos negros, que concentran una elevada siniestralidad sobre dos ruedas, son tales porque curiosamente confluyen una serie de factores. Sí, son puntos críticos porque son zonas de orografía complicada, con muchos tramos de curvas sinuosas, con acantilados, pequeños muros a escasos centímetros donde finaliza el asfalto y, en muchos tramos, con piedra volcánica de cantos vivos que impide que haya espacios en los bordes de la carretera donde poder frenar en caso de emergencia si tienes un despiste. Si sales del asfalto es caída segura.
A esta complicada orografía no tienes más que añadir buenas temperaturas durante todo el año, paisajes increíbles y asfalto con buen agarre, para que miles de motos se paseen los 365 días del año. El resultado es que hay más motos circulando durante todos los meses del año, haciendo más kilómetros que en el resto del territorio peninsular. Y, aunque quizás el número de accidentes mensual puede ser idéntico al de cualquier otra provincia española, al haber siempre el mismo número de accidentes todos los meses del año la suma final es escandalosa.
En lo que llevamos de año en Tenerife se han contabilizado 15 conductores fallecidos, de los cuales 7 eran moteros, una cifra demasiado elevada. La solución pasa por más controles y sensibilización de los conductores, de dos y cuatro ruedas, para que conduzcan con mayor precaución, prestando más atención y a menor velocidad. Un verdadero paraíso que, por desgracia, es un infierno para la siniestralidad.
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