El Real Madrid ha logrado un respiro en su travesía antes de enfrentarse al Everest de la Champions League. Tras una racha de resultados irregulares, el equipo merengue consiguió una importante victoria que ha renovado la confianza en la plantilla. Este triunfo llega en un momento crucial, justo antes de afrontar un desafío de gran envergadura en la máxima competición europea. Con Zidane al mando, el conjunto blanco parece haber encontrado el equilibrio necesario para encarar con determinación el próximo encuentro. La afición, expectante y esperanzada, aguarda con ansias el desenlace de esta apasionante temporada que promete emociones fuertes. El Real Madrid, histórico contendiente, se prepara para escalar la cima más alta del fútbol europeo.
Real Madrid: Descanso necesario antes de afrontar el desafío del calendario
Respiro antes del Everest. Eso es lo que se ha decidido en el Real Madrid durante este parón de selecciones en el que Ancelotti, sin los 14 internacionales en su plantilla, ha dado unas pequeñas vacaciones a sus jugadores que no volverán a trabajar hasta el próximo martes a partir de las 15:00 horas.
Serán pues unos cuatro días de descanso en el que los jugadores que no han tenido oportunidad de acudir con sus respectivas selecciones, puedan recargar las pilas antes de lo que viene. Y es que lo que viene es un calendario plagado de partidos difíciles y decisivos en los que el conjunto blanco tiene que dar el callo, como se dice coloquialmente, si quiere asegurarse LaLiga y seguir vivo en la Champions.
De primeras, a su vuelta, tendrá una cita con el Athletic Club en el Bernabéu, el día 31 de marzo, al que le seguirá, eso sí, una semana sin partidos por la presencia de la final de Copa y, a continuación, la eliminatoria de cuartos de final ante el Manchester City. El primer partido, en el Bernabéu, servirá como ante sala del que será el decisivo en Mánchester. Entre medias, una visita a Mallorca para jugar con el equipo de Aguirre.
Y ya para terminar el sprint, que no la carrera, los blancos recibirán el 21 de abril al Barcelona en el Bernabéu con el resultado de la Champions ya conocido y con la presencia o no de los blancos en las semifinales.
Así pues, desde el descanso, los blancos y, sobre todo, Ancelotti, se preparan para lo que viene porque no es poco.
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