En un giro inesperado de los eventos, Donald Trump reapareció en un acto público después de un atentado que había generado gran conmoción en todo el país. Sin embargo, lo que verdaderamente llamó la atención de los asistentes al evento no fue la presencia del ex presidente estadounidense en sí, sino el extraño atuendo de sus seguidores. Los participantes del acto no pudieron evitar fijarse en los símbolos extraños y las ropas llamativas que portaban los partidarios de Trump, lo que ha generado un gran debate en torno a la naturaleza de este grupo de apoyo. Algunos han llegado a calificar esta agrupación como una secta enmascarada bajo la apariencia de apoyo político, lo que ha generado un gran revuelo en los círculos políticos y sociales.
La misteriosa gasa que espanta: Trump vuelve a la escena y sus partidarios lo imitan
El pasado fin de semana, durante un mitin en el estado de Pensilvania, el expresidente de los Estados Unidos y candidato del Partido Republicano para las siguientes elecciones, Donald Trump, sufrió un intento de asesinato. Un joven de 20 años disparó con un rifle desde más de 100 metros de distancia y la bala impactó en la oreja del expresidente.
El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, atacado en un mitin en Pensilvania Gene J. Puskar / Ap-LaPresse
Desde entonces, los medios de comunicación no han dejado de hablar de ello. Algunos han puesto el foco en cómo pudo suceder algo así, preguntándose si el Servicio Secreto hizo bien o no su trabajo ese día. Otros empiezan a analizar cómo afectará este ataque al resultado electoral del próximo mes de noviembre, si es que lo hace. Pero, más allá de todo esto, las miradas estaban puestas en la reaparición pública de Trump.
El candidato de los republicanos aparecía el lunes en otro acto de campaña, y lo hacía con una especie de gasa en su oreja derecha, el punto de impacto de la bala que se vio ensangrentado cuando Trump volvió a ponerse de pie tras recibir el disparo. Y si la foto del expresidente alzando el puño tras el ataque se ha convertido en un estandarte para sus votantes, parece que la gasa también es ahora un símbolo republicano.
Este miércoles daba lugar una convención nacional de los republicanos (RNC) en Milwaukee, y Trump debía acudir también a ella. Así lo hizo, reapareciendo nuevamente ante las cámaras después del intento de asesinato sufrido el pasado sábado. Sin embargo, lo que seguramente ni el propio expresidente esperaba era el gesto de sus seguidores a su llegada.
Los republicanos acudieron al acto de Trump con la misma gasa en sus respectivas orejas, replicando así la imagen de Trump con su oreja vendada. Los vídeos e imágenes de este extraño movimiento no tardaron en llegar a las redes sociales. Y nadie daba crédito. Es una secta, señalaban algunos. Es lo más vergonzoso que he visto nunca, calificaban otros. En definitiva, las redes alucinaron con este gesto de los republicanos.
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