La reciente intervención del músico Nacho Cano en Telecinco ha generado un gran revuelo en la opinión pública. Sus declaraciones sobre la inmigración han sido objeto de controversy y debate, lo que nos lleva a reflexionar sobre el poder que tienen las palabras en la formación de la opinión pública y en la percepción que tenemos de los demás. En este sentido, es fundamental ser conscientes de la importancia de utilizar un lenguaje respetuoso y inclusivo en todas las situaciones, evitando aquellos términos que puedan ser ofensivos o discriminatorios. La tendencia a generar polémica no debe llevarnos a utilizar un lenguaje que hiera la dignidad de las personas, sino que debemos buscar la armonía y el respeto en nuestras expresiones.
Nacho Cano genera polémica con declaraciones sobre la inmigración en Telecinco
El conocido productor Nacho Cano ha sido detenido en Madrid por la presunta contratación ilegal de inmigrantes en su espectáculo musical Malinche. Después de ser puesto en libertad, Cano dio una rueda de prensa en la que negó cualquier responsabilidad y cargó contra las autoridades, alegando que estaba siendo objeto de una persecución por apoyar públicamente a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Además, el compositor también cargó contra algunos medios y alegó que los jóvenes, todos mexicanos de Guadalajara, eran becados con un contrato de prácticas. Varios de ellos también hablaron en la rueda de prensa y defendieron la versión del productor.
Declaraciones polémicas en 'Vamos a ver'
Este miércoles, Nacho Cano apareció en el programa 'Vamos a ver' de Telecinco, donde reiteró su versión de los hechos. Ellos [los jóvenes, presuntas víctimas] han venido aquí y han visto cómo les trataba la policía y lo que intentaban hacer con ellos. La mejor defensa en este caso que tengo es lo que ellos tienen que decir, dijo en una entrevista con Joaquín Prat.
En su intervención, Cano hizo comentarios que han generado polémica. Ya quisieran la mayoría de los inmigrantes tener su sitio de estudio, estar cantando y bailando con sus profesores, totalmente protegidos, con una bienvenida y conocimiento de la embajada de México según llegan, afirmó.
El productor también insistió en que las personas habían venido a España para formarse como artistas y después regresar a su país. Aquí todo está clarísimo. El papelito que tiene que ir y volver. Pues ahí están los abogados con ellos. Al final del día es el juez el que tiene que dictaminar si ha habido cualquier cosa en el proceso, dijo.
Contraste con la investigación policial
Estas declaraciones contrastan con un artículo publicado por 'El País' que revela las condiciones en las que las presuntas víctimas desarrollaban su actividad laboral. Según la investigación, a estos jóvenes se les denegó en mayo el permiso de estudios porque no convencieron a las autoridades de tener una formación relacionada con la labor que venían a llevar a cabo en España.
Fuentes policiales citadas por el medio aseguran que los jóvenes estaban siendo engañados y no tienen contrato alguno. Fue una de las jóvenes, que Cano tachó de problemática, la que puso a la policía en conocimiento de la situación.
La investigación reveló que las presuntas víctimas estaban alojadas en un hostal, compartían habitaciones de cuatro en cuatro, y solo les pagaban un menú de 10 euros al día en el mismo restaurante (el resto de comidas debían costeárselas ellos mismos). También se les daba una paga de 20 euros el fin de semana y otra de 300 euros al mes (posteriormente, 500 euros). Trabajaban de 9.30 h a 19.30 h de lunes a sábado, con algunos domingos.
La investigación arrancó el 11 de enero de este año, después de que la joven problemática habló con la policía.
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