Nadie puede costear la cláusula de Aitana en el fútbol femenino: un obstáculo para las transferencias
El fútbol femenino se enfrenta a un nuevo obstáculo en su camino hacia la profesionalización y el reconocimiento. La cláusula de Aitana, que establece una compensación económica para los clubes que forman a las jugadoras, se ha convertido en un impedimento para las transferencias en este deporte. La cifra de 300.000 euros, establecida como mínimo para la compensación, resulta inasequible para la mayoría de los clubes, lo que limita las posibilidades de transferencia de las jugadoras y restringe su capacidad para desarrollar su carrera en otros equipos.
La cláusula de Aitana, un obstáculo para las transferencias en el fútbol femenino
Aitana Bonmatí, la actual Balón de Oro, firmó este lunes su renovación por el FC Barcelona hasta 2028, con lo que la centrocampista culé continuará su carrera con el club de su vida, como era su deseo.
Con 26 años, la trayectoria de Aitana está plagada de éxitos que aspira a seguir ampliando en el que es el mejor equipo del mundo y vigente campeón de todo. Su agente, Cristian Martín, aseguró al programa 'Que t'hi jugues' de SER Catalunya, que ahora mismo, es prácticamente imposible que ningún club pueda llegar a pagar la cláusula, es prohibitiva.
La renovación de Aitana es un contrato al nivel del mejor del mundo, según palabras de su agente, el contrato de Aitana está a la altura de ser el mejor del mundo. Esto se debe a la alta cláusula que se ha establecido, lo que hace que sea prácticamente imposible para otros clubes pagar por su traspaso.
La continuidad de Aitana en el Barça es un golpe para los clubes rivales, que ya no podrán contar con la opción de fichar a la jugadora más destacada del fútbol femenino actualmente. La alta cláusula asusta a los clubes rivales, que no podrán competir con el contrato ofrecido por el Barça.
En cualquier caso, la renovación de Aitana es un final feliz para el club y la jugadora, que podrán seguir cosechando éxitos juntos. La centrocampista culé disfrutará de un futuro en el equipo que siempre ha querido jugar, y el Barça se asegura la continuidad de una jugadora criada en casa y con muchas temporadas por delante.
La noticia es un golpe para los clubes rivales, que ya no podrán contar con la opción de fichar a Aitana. La alta cláusula es un obstáculo insuperable para cualquier club que intente fichar a la jugadora.
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