Los seguidores del Real Madrid, dejados a merced de la suerte en un barrio problemático de Niza

Los seguidores del Real Madrid, dejados a merced de la suerte en un barrio problemático de Niza

La pasada noche, cientos de aficionados del Real Madrid se encontraban en un estado de alarma y confusión en el barrio de la Arenas, en la ciudad francesa de Niza. El encuentro entre el Real Madrid y el Olympique de Niza, correspondiente a la Liga de Campeones, se convirtió en un auténtico calvario para los seguidores del equipo blanco, quienes se vieron abandonados a su suerte en un área conocida por su dificultosa seguridad. La falta de medidas de seguridad efectivas y la insuficiente presencia policial crearon un clima de tensión y miedo entre los aficionados, que se sintieron vulnerables y desprotegidos en el corazón de la ciudad.

Retroceso en la seguridad: Aficionados del Real Madrid abandonados en barrio peligroso de Niza

La alegría del partido se convierte en pesadilla para los aficionados del Real Madrid

La Real Sociedad logró un punto en Niza, y los cerca de 150 aficionados del Real Madrid que viajaron a la localidad gala disfrutaron del encuentro. Sin embargo, la alegría se les fue rápidamente cuando, después del partido, fueron abandonados a su suerte en un barrio peligroso a medianoche, sin transporte público.

Muchos de los aficionados se quejaron en redes sociales y algunos han avisado de que llamarán al club para mostrar su disconformidad. Otros, como Aitor, cuentan a MD que no quieren disculpas ni nada y que solo quieren que mejore para la próxima vez, porque lo sucedido no puede volver a pasar.

Medidas de seguridad estrictas pero ineficaces

Las estrictas medidas de seguridad no fueron del gusto de muchos, teniendo que desplazarse a una especie de descampado en una barriada chunga, según Aitor. Allí debían recoger una pulsera obligatoria para entrar al estadio y montarse en los buses. Según Aitor, todo lo anterior al partido funcionó bien, con la seguridad del club pendiente de ellos.

Abandonados en un barrio peligroso

Sin embargo, el problema llegó después. Los aficionados fueron retenidos en el estadio hasta que se vació del todo, algo habitual, luego les bajaron al parking del mismo para montarse de nuevo en los buses. Los aficionados afirman que el bus estuvo media hora dando vueltas por la autopista sin sentido cuando en la ida el trayecto duró cinco minutos. Todo para que al final les dejasen en el mismo descampado, pero pasada la medianoche.

El último tranvía ya había pasado y no paraban de llegar otros en la otra dirección. Preguntamos al conductor y nos dijo que sí vendrían más, no sé si con mala fe o qué, pero no vino nada. Estaban de madrugada en un barrio peligroso de Niza, en un sitio que parecía un descampado de yonkis, en el que había incluso un charco de sangre reciente, sin opción de transporte público.

Los aficionados se las arreglan para regresar a sus hoteles

Algunos se animaron a ir andando al aeropuerto, que estaba relativamente cerca, para desde allí coger un taxi al hotel. Otros seguían esperando al tranvía que no llegó. Había familias con niños y también gente mayor, según relata Aitor. Tuvieron que tirar de Uber, una aplicación complicada para gente entrada en edad o que no está acostumbrada.

Nuestro Uber nos hizo el favor de pedir otro para gente mayor que estaba allí y no sabía bien usarlo, dice Aitor a MD. En definitiva, la afición se quedó tirada y llegó a las tantas al hotel, pasada la una de la madrugada en todos los casos.