Los Celtics, imparables en su camino hacia la Liga como el City de Guardiola

Los Celtics, imparables en su camino hacia la Liga como el City de Guardiola

En un dominio absoluto, el equipo de los Celtics sigue imparable en su camino hacia la Liga, demostrando una solidez y consistencia que recuerda a la época dorada del Manchester City bajo el mando del técnico Pep Guardiola. Con una racha de ganancias consecutivas que no parece tener fin, los Celtics se han convertido en la gran sensación de la temporada, dejando atrás a sus rivales y estableciéndose como los principales candidatos para aupar el título. ¿Serán capaces de mantener este ritmo y llevarse el trofeo? Solamente el tiempo lo dirá, pero por ahora, los Celtics están en estado de gracia, y su juego es un espectáculo que deleita a los aficionados.

La rebelión de la maldición: Boston Celtics se adentran en la incertidumbre

La maldición del campeón que no repite amenaza, las angustiosas finanzas acechan, disparado el coste de la plantilla y más que lo hará. Pero los Boston Celtics no ceden. Se quieren hacer oír y, para proclamar su rebelde ambición, se adelantaron al resto para celebrar el Media Day, el cual la inmensa mayoría de equipos llevarán a cabo el domingo 30 de septiembre.

El objetivo: ganar el campeonato cada año

“Queremos ganar el campeonato cada año. Ese es el objetivo, el estándar, la expectativa. Lo que ocurrió el año pasado no lo cambia”, espetó el entrenador del conjunto de los Tatum, Brown, Porzingis y compañía, Joe Mazzulla. Siempre con ese inexpresivo posado enigmático, la cara de Mazzulla es la misma siempre, gane o pierda, nada de sonrisas o muecas, como si estuviera programado para decir lo que tiene que decir con ese tono lineal y sin parpadear. Pero lo que dice tiene mucha sustancia.

La lección de Pep Guardiola

Poco se parece en su comunicación no verbal a su amigo y mentor Pep Guardiola, quien le dio alguna que otra pauta táctica en las Finales para penetrar la granítica defensa de los Dallas Mavericks de Luka Doncic. Pero su rigor, su seriedad y contundencia en su mensaje para que sus pupilos no caigan en la temida autocomplacencia en aras de mantener la excelencia son idénticas.

El desafío más grande: mantener la excelencia

“El desafío más grande es pensar que, porque lo hemos hecho de una manera simplemente tenemos que hacerlo de esta manera de nuevo. Hay obviamente principios no negociables, cosas que tenemos que hacer cada año, pero también cosas que ajustar y encontrar maneras de ser mejores. Tenemos que tener la mente abierta y saber que sólo porque funcionó una vez va a funcionar otra vez”, advirtió Mazzulla. “Ganar es tan peligroso como perder y viceversa”, agregó también el técnico de 36 años en una frase muy significativa, conocedor también de la reciente maldición de la NBA: desde los Toronto Raptors de Marc Gasol y Serge Ibaka en 2019, el campeón jamás ha pasado de las Semifinales de Conferencia en su defensa del título.

La amenaza financiera

Precisamente el mantener el mismo bloque de jugadores sin haber perdido a ninguna pieza importante -tampoco de banquillo-, es lo que supone una amenaza subyacente para los Celtics en el sentido financiero. Debido a las cada vez más estrictas normas económicas de la NBA ‘anti-dinastía’, la de Boston será esta temporada la tercera plantilla más cara con 201 millones de dólares de masa salarial, sólo por detrás de los 219 de los Phoenix Suns y los 205 de los Minnesota Timberwolves.

La incertidumbre económica

Sin embargo, lo peor vendrá a partir de la siguiente campaña, la 2025-2026, cuando los Celtics tengan que pagar más de 500 millones de dólares entre salarios y penalizaciones por exceder el límite salarial. Además de otros actores esenciales en el quinteto titular como Derrick White, Jaylen Brown y Al Horford -será titular en lo que dura la ausencia de Porzingis-, el conjunto de Massachusetts extendió el contrato de importantes actores secundarios como Payton Pritchard y Sam Hauser.

La respuesta de los Celtics

Con la luz verde de la propiedad para aflojar millones y millones, el presidente de operaciones de Boston, el metódico Brad Stevens, lo ha tenido claro a la hora de planificar la plantilla. El ejemplo reciente de Denver es un buen espejo en el que mirarse para los Celtics, pues el conjunto liderado por Nikola Jokic sólo ha hecho que perder actores de rol clave desde que fuera campeón con las marchas de Bruce Brown y Jeff Green el pasado verano y de Kentavious Caldwell-Pope y Reggie Jackson en el presente.

La motivación de Tatum y Brown

“¿Necesitaba alguna motivación para esta temporada? No, no daré crédito a nadie en particular”, dijo Tatum en el Media Day en declaraciones recogidas por la ESPN. “En tiempo real, fue duro (no tener tantos minutos en los Juegos). Fue una circunstancia única, algo que nunca he experimentado antes en mi carrera. Pero soy un creyente en que todo pasa por alguna razón. Venía de ganar un campeonato, lo más alto de lo más alto, portada del 2K, un nuevo contrato, y pasó eso. Cualquiera que sea la razón, no le he averiguado aún. Pero soy un creyente de que las cosas pasan por una razón”, reflexionó el ‘0’.

“Ahora quieres estar por lo menos en la misma habitación con los otros grandes equipos de los Celtics”, agregó Tatum en referencia a mantener el éxito.

La respuesta de Porzingis

“Estoy extremadamente hambriento”, advirtió el pívot de 29 años, quien rindió a la altura de lo esperado pero solo jugó 57 partidos de la fase regular y se perdió partidos de la primera ronda y de las Finales además de no jugar ninguno en las Semifinales y Finales de Conferencia debido a sus recurrentes problemas físicos. “Todavía siento que tengo esa espina clavada. Quiero permanecer sano durante estos siguientes playoffs que tendremos y todavía tengo muchas cosas que demostrar ante mis propios ojos”, aseguró Porzingis.

Su ausencia pondrá a prueba la esencia de equipo de Boston para encarar el objetivo en el primer tramo de temporada de la misma manera que la grave lesión de Rodri lo hará con el músculo del City como colectivo. Igual que los de Guardiola, los Celtics contra todos y contra todos.