La sensación de seguridad
En la actualidad, la sensación de seguridad es un tema de gran relevancia en la sociedad. La percepción de riesgo y la confianza en las instituciones y autoridades son fundamentales para garantizar la tranquilidad ciudadana. Sin embargo, en muchos países, la sensación de inseguridad es cada vez más común, lo que genera un clima de incertidumbre y miedo. En este sentido, es necesario analizar las causas y consecuencias de esta problemática, así como las medidas que se pueden implementar para mejorar la seguridad ciudadana y restaurar la confianza en las instituciones.
Confianza en el Barça: siete victorias seguidas y el espíritu en alza
Siete de siete. Y mañana podrían ser ocho victorias seguidas en Liga. La sensación es de confianza, mucha confianza. Diría hasta de superioridad, aunque en esta competición hay que mantener siempre los pies en el suelo.
Cuando vas a Montjuïc, ves por todas partes caras de alegría y optimismo. Sólo basta con revisar las cifras de asistencia frente al Getafe en un miércoles de trabajo, pues más de 44.000 estaban animando y, sobre todo, disfrutando cada minuto de una nueva etapa.
Con Flick, el Barça se ha levantado con mucha fuerza y ha mandado un mensaje claro a los rivales pese al dolor de las lesiones y sin haber realizado muchos fichajes.
Pocos esperaban un comienzo así después de la derrota contra el Mónaco en el Gamper, pero el bueno de Hansi compareció esa misma noche en rueda de prensa y dijo: “El sábado, en Mestalla, veréis una cara diferente de este equipo”. Dicho y hecho. Porque las victorias con el técnico alemán se consiguen, o arrasando o luchando, pero se consiguen, quitando el accidente de Champions en el estadio Louis Il.
La fantasía relación entre Flick y sus jugadores
Una de las cosas que noto claramente desde el comienzo de esta temporada es la fantástica relación existente entre Hansi Flick y sus jugadores. Sólo tenéis que ver los abrazos que se pegan al salir o entrar al terreno de juego. Si sacas a Lewandowski en la segunda parte lo ves y si metes a Ferran en la última media hora también lo ves.
Además, Jules Koundé ya se siente lateral y los jóvenes empiezan a pensar claramente lo siguiente: “Viendo lo de Bernal, Casadó y compañía, aquí puedo jugar perfectamente”. Vendrán curvas, pero hay que disfrutar.
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