La norma, la precisión y el legado de Wenger

La norma, la precisión y el legado de Wenger

En el mundo del fútbol, pocos entrenadores han dejado una huella tan profunda como Arsène Wenger. Con una carrera que abarca más de tres décadas, el francés ha establecido un estándar de excelencia en el Arsenal Football Club, donde dirigió al equipo durante 22 años. Su legado es ampliamente reconocido, no solo por sus logros en el campo, sino también por su influencia en el desarrollo del fútbol moderno. Wenger es conocido por su obsesión por la precisión, que se refleja en la forma en que su equipo jugaba, con un estilo caracterizado por la posesión del balón y la creación de oportunidades de gol. Sin embargo, su legado va más allá de los números y los títulos, ya que ha inspirado a una generación de entrenadores y jugadores.

La norma en debate: ¿Flexibilizar el fuera de juego o aceptar la precisión?

Es comprensible el enojo danés por el gol anulado a Andersen por unos milímetros, apenas dos minutos antes de que cometiera el penalti que sentenció su choque con Alemania. En ambas acciones intervino el VAR y en ambas a favor de los locales. Si el lateral diestro danés hubiera calzado un 38 en lugar de un 42, por decir algo, tal vez ahora estaríamos hablando de otro desenlace, quién sabe.

La indignación de los nórdicos, sin embargo, no significa que el gol estuviera mal anulado. Por milímetros pero sí, el danés estaba en fuera de juego. Reglamento en mano, estaba más adelantado que el último defensa alemán. Y esto es fuera de juego. Suponiendo, que hay que suponer que sí, que la línea que tiró el ordenador y la digitalización de la imagen de los jugadores implicados fueran correctas.

¿Hay que flexibilizar la norma? Algunos defienden que un margen tan escaso como el de la punta de la bota no da ventaja al delantero. Y que el fuera de juego no debería pitarse cuando estuviera, simplemente, adelantado, sino cuando estuviera, por ejemplo, 20 centímetros adelantado. ¿Cambiaría esto algo? No. Porque el día que en lugar de estar 20 centímetros adelantado lo estuviera 21 estaríamos en las mismas.

La norma, con sus defectos, es la que es. Se entiende (cualquier aficionado lo hará si se pone en la piel de los daneses o si visualiza una acción en la que sea su equipo el perjudicado) el malestar de Dinamarca. Pero o cambiamos la norma del fuera de juego o hay que aceptarla tal cual está.

Wenger y la polémica del fuera de juego: ¿Un gol anulado por apenas un milímetro?

Arsène Wenger, el ideólogo de algunos de las grandes modificaciones del reglamento en los últimos años, defiende que el fuera de juego desaparezca siempre que alguna parte del cuerpo del delantero esté por detrás del defensa que marque la línea. Con esta teoría, el gol de Andersen habría subido al marcador. Es una opción. Pero de momento, solo eso, una alternativa.

Y ojo, que el próximo curso el fuera de juego semiautomático llega a nuestra Liga. Y empezaremos a ver goles anulados por esos milímetros de más que tanto encendieron el sábado a los daneses. En según qué partidos pase, la polémica durará menos que nada. Si pasa en un Clásico. Wenger ya se frota las manos.