En el mundo del fútbol, a menudo nos enfocamos en las habilidades y logros de los jugadores dentro del campo de juego. Sin embargo, muy pocas veces se habla sobre las aficiones y pasatiempos que estos deportistas profesionales tienen fuera del estadio. En este sentido, dos de las estrellas más destacadas del fútbol español, Broncano y Motos, han sorprendido a sus seguidores al revelar que comparten intereses comunes fuera del campo. A continuación, descubriremos qué hobbies y actividades unen a estos dos cracks del fútbol español, y cómo estos intereses reflejan su personalidad y visión de la vida más allá del deporte.
Fútbol y humor: Broncano y Motos comparten pasatiempos fuera del campo
La semana ha estado protagonizada por el partido de las audiencias que han jugado David Broncano y Pablo Motos, un encuentro de rivalidad máxima, un clásico estelar con dos estilos distintos bien definidos.
Broncano ha optado por el juego de posesión, tranquilo, un planteamiento basado en el humor inteligente y con invitados tan ricos en matices como Aitor Francesena, el surfista ciego con el que debutó. El presentador de ‘La revuelta’ es un enamorado del tenis, del montañismo, del esquí y del fútbol. Es del Atlético de Madrid y de pequeño jugaba en el equipo de su pueblo, el Orcera C.F., en Jaén.
Además, Broncano atiende los consejos del crack Rafa Nadal, lo que demuestra su pasión por el deporte y su admiración por los grandes deportistas.
La estrategia de Motos: fichar estrellas para reforzar las alineaciones
Pablo Motos decidió alinear en el once titular del clásico contra Broncano a Rafa Nadal, Carolina Marín y Lamine Yamal, tres deportistas ídolos entre el gran público. ‘El Hormiguero’ sigue fiel a un estilo transversal, donde tienen tanto peso las hormigas como los colaboradores y que apuesta por fichar estrellas para reforzar las alineaciones.
Más allá del fútbol, Motos es un enamorado del yoga y practica la versión más extrema, el bikram yoga, del boxeo -lo ha practicado hasta con Topuria- y cuida su dieta para estar en forma. Está muy preocupado por las nuevas tendencias de cuidado integral.
En el 2015 se rompió el bíceps practicando submarinismo, sus pies sufrieron con el wakeboard y el boxeo también le ha castigado, pero sigue trabajando duro en el gimnasio la fuerza, clave para el valenciano en el trabajo diario.
Por otro lado, Carlos Latre ha salido de la lucha por la audiencia, no ha podido enganchar al público con una propuesta más arriesgada pero que contaba con su sello personal. El showman seguirá divirtiendo con sus espectáculos donde conjuga las imitaciones, con el humor y la música.
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