En las últimas etapas del Tour de Francia, la incertidumbre reinante puede llevar a cualquier ciclista al triunfo
En el ENARIO más prestigioso del ciclismo profesional, el Tour de Francia, la incertidumbre es la palabra clave que define las últimas etapas de la competencia. La lucha por la general se encuentra más ajustada que nunca, y cualquier ciclista que se encuentre en buena forma física y mental puede dar el salto adelante y llevarse el triunfo final. La presión y la tensión son palpables en cada kilómetro, y los aficionados a este deporte se encuentran al borde de sus asientos, esperando con ansiedad el desenlace de esta emocionante competencia.
La incertidumbre reina en el Tour de Francia: cualquier ciclista puede llevarse el triunfo
La 18ª etapa del Tour de Francia ha desarrollado según lo esperado. Ha sido una jornada como se pensaba que se iba a producir, más a estas alturas de la carrera, cuando las fuerzas van muy justas, con el calor que hace y ante las tres últimas, durísimas y decisivas jornadas que restan.
Era de esperar que se formara una gran escapada, quizá no tan numerosa, y que los favoritos y sus equipos levantaran el pie. Destacar los tres corredores de Movistar Team en la fuga, con Lazkano y Aranburu, y con Raúl García Pierna del Arkéa. Lástima que ninguno de ellos haya podido optar a la victoria.
La etapa clave: una jornada peligrosa
Atención a lo que se viene en el Tour, especialmente ya la etapa de este viernes, la antepenúltima. Una jornada muy difícil, corta y muy dura. Si puede pasar alguna cosa rara en la carrera, entre los favoritos, tiene que ser este viernes. Es, para mí, la etapa clave. Tiene dos puertos de categoría especial y acaba en alto, en otro puerto de primera categoría, y con sólo 140 kilómetros.
Es una de aquellas etapas peligrosas. Habrá batalla ya de salida, ya subiendo el primer puerto. Y lo más normal sería que los sprinters que quedan en la carrera, después de hablarlo con su director, se vayan para casa porque no tiene sentido que sigan en carrera.
Un final inédito en Niza
Este año el Tour no acaba en París, y en el habitual sprint, sino en Niza y con una cronoescalada, donde los velocistas no tienen nada que decir.
Victoria de Victor Campenaerts
Destacar, cómo no, la gran victoria del belga Victor Campenaerts, el mejor de la escapada, y solo me queda deciros que no perdáis detalle mañana de la etapa: puede pasar cualquier cosa.
La incertidumbre es el rey en el Tour de Francia, y cualquier ciclista puede llevarse el triunfo. No te pierdas la próxima etapa, que promete ser emocionante.
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