El UFC 244: la batalla épica entre Jorge Masvidal y Nate Díaz

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El UFC 244: la batalla épica entre Jorge Masvidal y Nate Díaz

El pasado sábado 2 de noviembre, el Madison Square Garden de Nueva York fue testigo de una de las peleas más emocionantes de la historia del UFC. La estelar del evento UFC 244 enfrentó a dos de los peleadores más populares y respetados de la categoría de peso welter: Jorge Masvidal y Nate Díaz. La batalla épica entre estos dos guerreros del octágono no defraudó a los expectantes, ya que ofreció una exhibición de habilidades, resistencia y valentía que dejará huella en la memoria de los aficionados al arte marcial mixto. A continuación, repasamos los detalles de esta emocionante pelea que ha sido calificada como una de las mejores de la historia del UFC.

La batalla épica entre Jorge Masvidal y Nate Díaz: un enfrentamiento sin cuartel en el Madison Square Garden

La UFC era demasiado pequeña para los dos. El Jesucristo de las Calles enfrentaba, después de una larga y ansiada espera, al chico malo de la empresa. El menor de los Diaz regresó por todo lo alto de un periplo de tres años inactivo con una gran victoria ante Anthony Pettis y, tres meses después, pidió al luchador de moda de la organización. Jorge Masvidal era el Rey viral de las artes marciales mixtas. Sus knockouts corrían por las redes a la velocidad de la luz y las visitas forraban en verde la carrera de un hombre forjado en la lucha sin guantes, en los sucios y siniestros patios de los barrios más peligrosos de la ciudad de Miami.

Una fórmula total que condujo sus aspiraciones a lo más alto de la cúspide del deporte. Sin embargo, Diaz era una personalidad experimentada en rebajar soufflés y ser el villano inesperado de la película. Con todos los papeles adjudicados, una guerra sin cuartel tomó lugar en el Madison Square Garden de la megalópolis de Nueva York en noviembre del año 2019.

La lucha por el título: Jorge Masvidal y Nate Díaz se miden en el octágono

La lucha por el título: Jorge Masvidal y Nate Díaz se miden en el octágono

Ambos guerreros llegan a la contienda con un factor en común. Son fieles representantes del germen original de la aguerrida disciplina. Disfrutan con la sangre, el resonar de las tibias y los ojos vueltos en color marfil del oponente al que acaban de noquear. Un apartado al que la UFC añade el hoy emblemático cinturón 'BMF': el galardón que la empresa adjudica para el enfrentamiento y que corona como el más hijo de p del planeta al valiente peleador que salga victorioso del octágono.

Por primera vez en la historia, en un claro movimiento de marketing, la empresa de Dana White confecciona una correa representativa para una de sus batallas. El encargado de encintar al vencedor será Dwayne Johnson, famoso peleador profesional de wrestling, quien no tiene una gran afinidad con Nate Diaz desde el principio.

La disputa en el clinch

El californiano acusa, desde un primer momento, de ser un host preparado de manera específica para apoyar a Jorge Masvidal y poder ser el encargado de coronar una noche redonda para el cubano. El menor de la saga de los Diaz formula una especulación que no consigue hacer mucho ruido en la construcción del feudo, pero que corona con un Que le f a The Rock en rueda de prensa.

Alejados del eco de los medios de comunicación y tras la correspondiente cita con la báscula, los altavoces del mundo moderno ponen el marcador a cero y en el Madison Square Garden sólo suenan dos sintonías: la banda sonora de la película Scarface y el ritmo de The Way I Am, de Eminem. Los cantos y melodías de los dos soldados dispuestos a morir sobre el tapiz.

El orgullo de la calle está en juego

Los ojos de los aficionados a las artes marciales mixtas actúan como fieles jueces en una contienda soñada por muchos. La reputación de las magulladuras de las peleas en la calle organizadas por el legendario Kimbo Slice chocan con el legado de los Diaz, una saga que es hoy todo un estandarte en las artes marciales mixtas.

En los primeros compases del combate, Masvidal rompe el hielo. Sale acompañado de un sprint y un amago de esbozar el mismo rodillazo que apagó las luces de Ben Askren en el pasado. Las risas de Nate Diaz sólo avecinan auténtica guerra, y el pronóstico acierta: el salvaje intercambio comienza en el centro de la arena más famosa de todos los tiempos.

La guerra sin cuartel

La disputa en el clinch culmina con dos codazos que suenan a palmetazo por parte de Jorge Masvidal en la parte superior del contrincante. La cabeza de Diaz da vueltas como ruleta de casino y su flaco cuerpo comienza a tambalear sobre el octágono. En un intento desesperado de trasladar el feudo al suelo, el americano intenta un derribo.

Sin embargo, una patada al borde de la sanción del cubano impacta de lleno sobre la mandíbula del rival. Todavía hoy no saben cómo pudo sobrevivir a aquel obús. Las grapas y puntos del pasado que crearon una película de piel todavía más fina sobre el rostro del peleador de Stockton se abren en canal ante el aluvión de golpes.

La sangre cae del rostro de Nate Díaz, y Gamebred avalancha su cuerpo sobre el del rival como piraña que huele la rojiza sustancia.

El resultado

El segundo episodio de la batalla es un calco exacto del épico comienzo del evento principal de la noche. Los aficionados no dan crédito de la fortaleza de Díaz, y Masvidal luce sorprendido con la resistencia de un peleador a quien nunca nadie debe dar por vencido.

Ya dio la campanada ante Conor McGregor. Ahora, busca hacer lo propio con el miembro de UFC más viral de todo el año 2019. Diez minutos cumple el combate cuando, a instantes de comenzar el tercer round, el doctor decide parar la pelea para prevenir al peleador californiano de cortes más severos en su rostro.

Los abucheos reinan en las repletas butacas del MSG, y The Rock prepara el cinturón de campeón. En un ambiente agridulce, el Jesucristo de las Calles es coronado como el nuevo 'BMF' y pide de inmediato una revancha.

Se lo acabo de decir a Nate. Juro que volveremos a enfrentarnos, tío. Me diste el amor y el respeto, y te lo daré de vuelta. No me gusta abandonar el ring así, con mi oponente consciente, sólo hay una manera de hacerlo y es bautizándolo. No pude hacerlo, concluye Jorge Masvidal sobre el tapiz del UFC 244.

Ahora, casi cinco años después y tras el ocaso de sus carreras en la empresa de artes marciales mixtas más importante del mundo, el último hombre en pie será el ganador definitivo de una guerra sin un ganador vencedor en el barro de la guerra. Dos de las más grandes leyendas de la historia de la organización de Dana White intercambian las cuatro onzas por el calzón, las botas y el noble arte para determinar, de manera definitiva, quién es el mayor hijo de p* del planeta y saldar una cuenta pendiente ante la atenta mirada de los nostálgicos fans de la disciplina con mayor crecimiento de los últimos años.

Daniel Ferrer

Hola, soy Daniel, experto en fútbol de El Rincón del Fútbol. Como parte de este periódico independiente de actualidad deportiva, me encargo de mantenerte informado sobre las últimas novedades del mundo del balompié con la máxima objetividad y rigurosidad. ¡Descubre conmigo todo lo que necesitas saber sobre el apasionante mundo del fútbol! ¡Bienvenidos a El Rincón del Fútbol!

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