- El Tour de Francia reanuda su ruta hacia el sur, con especial cuidado por las condiciones meteorológicas
- Tour de Francia: el pelotón se prepara para enfrentar vientos y abanicos en una jornada emocionante
- La batalla entre Pogacar y Vingegaard no pierde intensidad: Tregua en la carretera, pero no en la lucha por el maillot amarillo
- El Tour de Francia reanuda su ruta hacia el sur: abanicos, vientos y estrategias en juego en una etapa emocionante
El Tour de Francia reanuda su ruta hacia el sur, con especial cuidado por las condiciones meteorológicas
Después de un breve descanso, la competencia ciclista más importante del mundo vuelve a tomar el camino, con los mejores ciclistas del planeta listos para afrontar los desafíos que se avecinan. La ruta hacia el sur de Francia se presenta como un reto importante para los participantes, quienes deberán superar los obstáculos climáticos que se avecinan. La preocupación por las condiciones meteorológicas es máxima, ya que se prevén fuertes vientos y lluvias intensas en las próximas etapas. A pesar de esto, los ciclistas están determinados a darlo todo y luchar por el liderato en la general.
Tour de Francia: el pelotón se prepara para enfrentar vientos y abanicos en una jornada emocionante
Cuando el Tour de Francia se aproxima a Saint-Armand-Montrond, las alertas se disparan y los abanicos se preparan. Nadie se atreve a predecir el resultado de la jornada, a pesar de que la ausencia de montañas en los 187,3 kilómetros entre Orléans y Saint-Armand-Montrond pueda sugerir un final al sprint.
La experiencia ha demostrado que el pelotón puede saltar en mil pedazos en una carretera expuesta al viento, a poco que el este se invite a la jornada y que los equipos quieran buscar sorpresas. Tras abandonar Issoudun, el pelotón se adentrará en rutas desprovistas de vegetación aledaña y los vientos laterales pueden causar estragos.
La batalla entre Pogacar y Vingegaard no pierde intensidad: Tregua en la carretera, pero no en la lucha por el maillot amarillo
La batalla entre el esloveno Tadej Pogacar y el danés Jonas Vingegaard no pierde un frente en el que pueda sacar ventaja. La tregua en la carretera ha sido reemplazada por una lucha verbal en los micrófonos de la prensa, donde el maillot amarillo general acusa al tercero de correr de forma demasiado conservadora.
Pogacar ha extremado los ataques en la primera semana contra un Vingegaard que llegó al Tour con pocos kilómetros en las piernas por la caída que sufrió en abril en la Vuelta al País Vasco. Las ofensivas del esloveno le han dado una renta de 1.15 contra el ganador de las dos últimas ediciones. Sin embargo, Pogacar tiene la mosca detrás de la oreja, ya que cree que Vingegaard está minimizando su estado de forma.
El Tour de Francia reanuda su ruta hacia el sur: abanicos, vientos y estrategias en juego en una etapa emocionante
El pelotón se enfrenta a una etapa emocionante en la que los abanicos y los vientos laterales pueden causar estragos. La carretera cambia tres veces de dirección en los 30 últimos kilómetros, lo que puede favorecer la formación de abanicos.
La batalla entre Pogacar y Vingegaard sigue siendo intensa, y el belga Remco Evenepoel, segundo de la general, pide un hueco en esa lucha. El ganador del pasado Giro de Italia insiste en que Vingegaard solo piensa en su rueda y se olvida del resto de los rivales.
La estrategia de Vingegaard es clara: perder el menor tiempo posible antes de la tercera semana, cuando esperan que su cuerpo esté al máximo nivel. El danés no oculta que su estrategia ha sido defensiva hasta ahora, pero cree que tiene terreno para recuperar.
El Tour de Francia afronta mañana la segunda semana, que les llevará a los Pirineos, tras superar el macizo central, con dos durísimos finales en alto. El resto de los postulantes a la general también esperan su momento, aunque asisten a la superioridad, por el momento, de los tres primeros de la general.
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