La comunidad deportiva española se encuentra conmocionada tras el olvido del Premio Princesa de Asturias en reconocer la histórica victoria de la selección femenina de fútbol en el Mundial. Este episodio ha generado un gran revuelo en el mundo del deporte y la sociedad en general. La omisión de este importante logro ha sido calificada como un grave error por parte de la institución que otorga el Premio Princesa de Asturias, considerado uno de los más importantes reconocimientos en España. La indignación es palpable entre los seguidores y los medios de comunicación, que ven en este olvido un desaire hacia las jugadoras que han hecho historia en el fútbol internacional.
El Premio Príncipe de Asturias olvida a la selección femenina de fútbol en su victoria
La noticia del Premio Princesa de Asturias de los Deportes ha generado un gran revuelo en el mundo del deporte español. Carolina Marín, la figura mundial del bádminton, ha recibido este reconocimiento merecidísimo por su destacada trayectoria y rendimiento altísimo durante tantos años. Sin embargo, ha llamado la atención que la selección femenina de fútbol, que acaba de ganar su primer Mundial, haya sido olvidada en la entrega de este premio.
Al analizar el palmarés de los Premios Príncipe de Asturias desde su instauración en 1987, se observa que en 2010, cuando la selección masculina de fútbol ganó su primer Mundial, el premio recayó en la selección española masculina de fútbol. Sin embargo, en esta ocasión, el jurado ha optado por otra opción, lo que se considera un agravio para la selección femenina.
La polémica Rubiales, que incluye el gesto en el palco y el beso a Jennifer Hermoso, ha empañado la gesta futbolística de la selección femenina. La noticia del Premio Príncipe de Asturias coincide con la decisión de la Audiencia Nacional de abrir juicio oral contra Rubiales, Vilda y Luque por el piquito no consentido del entonces Presidente de la Federación.
Ayer, Jennifer Hermoso, la estrella del fútbol femenino, cumplía 34 años. Quizá hubiera sido un mejor regalo para ella y sus compañeras saber que les otorgaban el Premio Princesa de Asturias por su flamante campeonato del mundo, en lugar de tener que revivir la pesadilla del presunto abuso en la Audiencia Nacional.
Es sorprendente que el jurado haya pasado por alto el logro histórico de la selección femenina de fútbol y no les haya otorgado el reconocimiento que merecían. Esperamos que en el futuro se tomen en cuenta los logros de las mujeres en el deporte y se les brinde el reconocimiento que merecen.
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