- El escándalo Nunnally enciende la temperatura con nuevos detalles
- Tensiones entre James Nunnally y Partizan: la guerra ha comenzado
- Demanda por difamación y incumplimiento de contrato
- El altercado con Lazarevic, el inicio del culebrón
- La versión de Partizan
- La respuesta de Nunnally
- La réplica de Partizan
El escándalo Nunnally enciende la temperatura con nuevos detalles
El escándalo Nunnally, que ha estado haciendo vibrar la opinión pública en las últimas semanas, acaba de tomar un nuevo giro inesperado. Después de una serie de revelaciones impactantes, nuevos detalles han salido a la luz que ponen en entredicho la integridad de los involucrados. La comunidad política se encuentra conmocionada ante las nuevas acusaciones que amenazan con derribar la carrera de varios altos funcionarios. A medida que la investigación avanza, se descubren nuevos hilos de corrupción que llegan a los más altos niveles del poder. En este artículo, analizaremos los últimos desarrollamientos de este caso y exploraremos las consecuencias que pueden tener en el futuro político del país.
Tensiones entre James Nunnally y Partizan: la guerra ha comenzado
Las tensiones entre el alero californiano James Nunnally y el club serbio Partizan no han hecho más que acrecentarse en estos últimos días después de que la entidad decidiera separar los caminos con el jugador.
Nunnally, de 34 años, ya no estuvo presente en la presentación oficial de Partizan ante su público la pasada semana, y a posteriori, el club anunció de manera oficial su marcha en las redes sociales del club.
Demanda por difamación y incumplimiento de contrato
Sin embargo, pese a que el jugador ya no forma parte de la disciplina del equipo de Zeljko Obradovic, la guerra no ha hecho más que empezar. De acuerdo con el medio serbio SportKlub, Nunnally ha impuesto una demanda contra la entidad por difamación, exigiendo 600.000 dólares por daños y prejuicios, y por incumplimiento de contrato, por lo que reclama 110.000 dólares.
El altercado con Lazarevic, el inicio del culebrón
Al final de la pasada campaña, durante el transcurso de los Playoffs de la Liga ABA, Nunnally tuvo un altercado con Stefan Lazarevic, jugador de Estrella Roja. Tras el incidente, Obradovic optó por no incluirlo en el equipo. Al final del curso, el club serbio decidió no renovarle el contrato.
La versión de Partizan
En el comunicado, el presidente del club, Ostoja Mijailovic, alegó que los jugadores firman unas normas disciplinarias que deben ser respetadas:
Además del contrato, los jugadores también firman normas disciplinarias que deben ser respetadas. Se le ha castigado por pegarse con el jugador de Estrella Roja. Ni siquiera le hemos dicho adiós, explicó el máximo mandatario.
La respuesta de Nunnally
No obstante, estas palabras de Mijailovic recibieron una rápida respuesta por parte de Nunnally a través de su cuenta personal en X, donde expuso haber actuado en defensa propia:
Oh, esto es difamación ya que actué en defensa propia. Vamos, Ostoja Mijailovic, no hablemos de reglas y normas del equipo. No se puede decir esto, pero no me ha pagado a tiempo durante dos años. ¡¿Supongo que las normas y contratos sólo se aplican si los jugadores no siguen?! Pararé aquí, sentenció el jugador.
La réplica de Partizan
A continuación, Partizan no tardó en emitir un comunicado en el que, además de despedir al jugador y agradecer los servicios prestados al club, se dejó claro que la decisión sobre el futuro del alero californiano la tomó el técnico, Zeljko Obradovic. Además, la entidad aseguró que Nunnally recibió todo el dinero que se le debía inmediatamente después del final de temporada.
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