En un tenso enfrentamiento en el hemiciclo, el diputado Alsina decidió interpelar a la consejera Núria Parlón sobre las presiones que el expresidente Carles Puigdemont ejerció sobre los diputados para lograr la formación de un gobierno en Cataluña. La interpelación se produjo en el marco de una sesión parlamentaria en la que se abordaron las acusaciones de presión que han rodeado la formación del ejecutivo. La respuesta de la consejera Parlón no se hizo esperar y fue contundente, lo que generó un fuerte debate en el pleno.
Puigdemont presiona para formar gobierno y el PSC no cede
Las urnas han dictado sentencia en las elecciones catalanas del 12M, y Salvador Illa y el PSC han resultado ser la lista más votada. Sin embargo, para gobernar, deberán llegar a un acuerdo con el resto de fuerzas del Parlament.
El líder de Junts, Carles Puigdemont, fue el primero en pronunciarse abiertamente sobre la posibilidad de formar gobierno, anunciando que se presentaría como candidato a una futura investidura. Además, dejó caer que una negativa de los socialistas podría hacer tambalearse los cimientos del gobierno de Pedro Sánchez.
La respuesta contundente de Núria Parlon: No se acepta coacción
Ante esta estrategia, el PSC no iba a dudar en responder. Núria Parlon, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet y portavoz de los socialistas, habló con Carlos Alsina en 'Más de uno' de Onda Cero para dar pistas sobre la hoja de ruta del PSC.
“Los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña han dejado claro que los partidos independentistas suman 61 escaños y representan el 43% de los votos. Se quedan muy lejos, explicó Parlon. No existiendo esa mayoría independentista sería deseable que no se bloquee por parte de ERC que Salvador Illa sea presidente, aclaró la portavoz.
Alsina quería incidir en lo dicho por Puigdemont, y lo dejó muy claro con su pregunta. ¿El PSC se siente obligado por los acuerdos que ha firmado el PSOE con Junts per Catalunya en Bruselas o en Suiza, a los que aludía ayer el señor Puigdemont?, planteaba el presentador.
“Tenemos claro que la presidencia de Catalunya se va a decidir en Catalunya. No vamos a aceptar que se ponga precio a la convivencia ni ninguna coacción, sentenciaba Parlon.
Es claro que el juego de las sillas ya ha comenzado, y la formación del gobierno en Cataluña sigue siendo un tema delicado y complejo. ¿Qué pasará en los próximos días? Solo el tiempo lo dirá.
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