El ataque feroz de Pogacar en la segunda etapa del Tour da el pistoletazo a la defensa de Vingegaard como líder.
La segunda etapa del Tour de Francia ha sido testigo de un ataque feroz por parte del esloveno Tadej Pogacar, quien ha lanzado un contraataque demoledor en la última parte de la etapa, lo que ha puesto en jaque la posición del líder provisional, Jonas Vingegaard. La defensa del maillot amarillo se ha convertido en el objetivo principal de la competencia, y el joven ciclista esloveno ha dado el pistoletazo de salida para una batalla emocionante en las etapas venideras. Con este movimiento, Pogacar ha demostrado su fuerza y determinación para llevarse la victoria final en París.
La lucha por el liderato comienza en el Tour de Francia
¡Hay Tour de Francia! Jonas Vingegaard ha acabado de un plumazo con las dudas que había acerca de su rendimiento, a espera de la alta montaña y de la llegada del Galibier el martes.
La segunda etapa del Tour se prestaba para que hubiera ataques entre los favoritos, especialmente en el circuito final de Bolonia con la doble ascensión a San Luca, corta y explosiva, de 1,9 kilómetros, con una pendiente media del 10% y rampas de 19%.
Pogacar da el golpe de gracia en la segunda etapa
El primer paso lo controló el Team Visma sin problemas, protegiendo a su líder, Vingegaard. En la segunda parte del recorrido, el equipo neerlandés quiso hacer lo mismo, pero Adam Yates se puso delante del reducido grupo de los notables, y en el tramo final de la ascensión Tadej Pogacar lanzó su bestial movimiento por la izquierda de la carretera.
Mientras, por la derecha, Jonas Vingegaard estuvo listo y rápido. Respondió a las mil maravillas el ataque de 'Pogi' y no cedió ni un metro, señal que el doble ganador de las dos últimas ediciones estaba bien.
Vingegaard responde con fuerza al ataque de Pogacar
Pogacar le pidió relevo y ambos se lanzaron en la bajada hacia Bolonia, eliminando en parte a algunos de sus principales rivales, como Roglic, ya que Carapaz y Evenepoel acabaron contactando con ellos, que no pudieron responder el movimiento de los dos capos de la carrera.
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