En un partido emocionante que mantuvo en vilo a los aficionados hasta el final, el Andorra sufrió un duro revés que puede tener consecuencias irreparables en su lucha por la permanencia en la categoría. La derrota ante el Sporting de Gijón ha llevado a los andorranos a enfrentar la realidad del descenso, una perspectiva que se había intentado mantener fuera de la mente pero que ahora es una cruda realidad. La derrota en este partido ha sido un golpe duro para el equipo, que ya se encontraba en una situación complicada en la clasificación.
Andorra sufre un duro revés en el Estadio El Molín
El Andorra ya tiene un pie en Primera RFEF. Faltando tres jornadas, los de Ferran Costa cayeron estrepitosamente ante el Sporting de Gijón (5-2) y están a un paso de certificar su descenso.
Esta vez fue Iván Gil quien acercó al equipo con dos goles, pero las urgencias del equipo les condenaron al contragolpe.
Modificaciones en la alineación
El Andorra tuvo que modificar su esquema ante las bajas por sanción de Petxa, Jandro y Scheidler. Es por eso que Costa recuperó a Iker Benito en el carril diestro y los tres centrales. Arriba, Karrikaburu empezó en el banquillo para dar entrada a Álvaro Martín.
Un partido complicado desde el principio
Pero el Andorra no tuvo tiempo ni a aclimatarse. Primero fue Cote quien, en una gran jugada de estrategia, anotó un golazo desde la frontal para avanzar al Sporting en el 11’. Los ‘tricolors’ no se dieron por vencidos, ni cuando a la media hora Otero se levantaba solo para ampliar distancias tras un grave error de Marsà y ponerles las cosas muy difíciles.
Un intento de reacción
Una gran jugada de Lobete al filo del descanso sirvió para que el delantero vasco se deshiciera de dos defensores y diera un pase a Iván Gil para que marcara el 2-1.
Segunda mitad desastrosa
Pero en la segunda mitad, las prisas pudieron con un Andorra que vio como, con los mismos males de toda la temporada -el balón parado y el contragolpe-, quedaban muy mermados.
Primero fue Queipo, nada más entrar, quien marcó de cabeza en el 64’. Gil contestó al instante marcando un golazo para el 3-2. Pero los de Costa asumieron demasiados riesgos y, con la defensa muy adelantada, Otero se plantó solo ante Ratti para marcar el cuarto. Nacho Méndez puso la manita en el 84’ mientras el suplicio se apoderaba de un Andorra tocado y hundido.
El Andorra está a un paso del descenso, y la derrota en el Estadio El Molín ha sido un duro revés para el equipo de Ferran Costa.
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