El Valencia CF de Baraja regresa a sus raíces, superando la crisis y reviviendo el espíritu inicial

El Valencia CF de Baraja regresa a sus raíces, superando la crisis y reviviendo el espíritu inicial

Tras un período de incertidumbre y desánimo, el Valencia CF de Ruben Baraja ha dado un giro radical en su camino, retomando el espíritu inicial que lo llevó a ser uno de los equipos más importantes de España. La crisis institucional y deportiva que azotó al club en los últimos años parece haber quedado atrás, y en su lugar, un renovado ánimo y entusiasmo se han apoderado del equipo y de la afición. Con una nueva filosofía de juego y un plantel rejuvenecido, el Valencia CF busca recuperar su lugar entre los grandes del fútbol español.

El Valencia CF de Baraja vuelve a las raíces: portería cerrada y presión alta le dan el triunfo

Blindar la portería, fútbol vertical y presión alta fueron las señas de identidad del Valencia de Rubén Baraja la pasada temporada y son los tres principios básicos a los que se aferró el equipo valenciano para ganar al Girona en casa, sumar el primer triunfo del curso y salir de la crisis.

Baraja tenía claro que su equipo tendría que sufrir mucho si quería ganar ante el Girona, un equipo de Champions pese a que este sábado no estuvo a su mejor nivel en Mestalla, y durante la semana pidió a sus jugadores volver a las bases de un Valencia que la pasada campaña apenas sufrió pero que en el inicio de este curso mostró síntomas de agotamiento.

Sin Hugo Duro arriba, con un solo punto de los primeros quince y hasta doce partidos sin ganar, el Valencia trató primero de cerrar su portería para después buscar el partido: La portería a cero siempre te da puntos y debe de ser una de nuestras señas de identidad. No siempre es fácil, pero hay que buscarlo, comentó al terminar el choque Baraja, que hizo volver a los inicios a su equipo.

No obstante, aun conscientes de que lo más importante era volver a dejar a cero la portería por primera vez en esta temporada, el equipo no se arrugó y, sobre todo en la segunda mitad, se lanzó a ser mucho más agresivo tras pérdida y precisamente de esa presión alta llegaron los dos tantos del Valencia.

Los dos tantos nacieron de dos robos en campo rival, una presión que el Valencia impulsó el pasado curso y que le sirvió para sumar muchos puntos de la mano de la velocidad de Diego López, Fran Pérez y Hugo Duro y que ante el Girona se repitió con el extremo asturiano, Luis Rioja y también Dani Gómez.

Se han visto las señas de identidad del equipo. Hemos competido fenomenal, con energía, hemos buscado el partido y hemos tenido la dosis de suerte que hace falta para ganar, insistió Baraja, que el año pasado consiguió que el Valencia mantuviera la portería a cero hasta en trece ocasiones en 38 jornadas.

Para Baraja, formado en el Valencia con técnicos como Héctor Cúper, Rafa Benítez o Quique Sánchez Flores, esa portería a cero sigue siendo el mayor tesoro que debe tener el Valencia partido a partido, aunque su equipo todavía necesita mucha mejoría de cara a puerta, pues hasta este sábado sólo sumaba tres goles en cinco partidos y los tantos de Dani Gómez y Luis Rioja llegaron por el desvío de Juanpe a la hora de despejar.

No obstante, si el Valencia gana a Osasuna, sumará siete puntos, uno más de los que sacó ante los mismos rivales el pasado curso, por lo que de conseguir una victoria, el conjunto valenciano habrá salido de una gran crisis de resultados y habrá dicho adiós a un calendario terrorífico para iniciar la Liga. En cualquier caso, ya llueve menos.