Después de la amarga derrota en Mónaco, Laporta, Deco y Flick mantuvieron una reunión de emergencia para analizar el futuro del equipo
En un intento por reaccionar ante la amarga derrota sufrida en Mónaco, el presidente del club, Joaquín Laporta, el director deportivo, Deco, y el entrenador, Hansi Flick, se reunieron de emergencia para analizar el futuro del equipo. La pérdida en el terreno de juego monégasque ha generado un clima de inquietud entre los seguidores y dirigentes del club, que buscan encontrar soluciones para revertir la situación actual. En este contexto, la reunión mantuvo como objetivo principal evaluar las opciones disponibles para mejorar el rendimiento del equipo y encontrar un camino hacia la estabilidad y el éxito.
Confianza máxima en el proyecto Flick: Laporta, Deco y el entrenador analizaron la derrota en Mónaco
La confianza en el proyecto de Hansi Flick y en el trabajo del vestuario barcelonista continúa siendo máxima en el FC Barcelona, pese a la derrota sufrida en Mónaco en el primer partido de la Champions League.
Así se lo transmitieron el presidente azulgrana, Joan Laporta, y el director deportivo, Deco, a Hansi Flick en el hotel de concentración, donde los tres mantuvieron una distendida charla después del partido, puesto que la expedición barcelonista pernoctó en Mónaco y regresó a Barcelona ayer por la mañana, entrenándose en la Ciutat Esportiva en sesión de recuperación nada más llegar.
Presidente, director deportivo y entrenador analizaron con calma la derrota y coincidieron en restarle importancia, más allá de aprender de los errores para tratar de que no se repitan, especialmente en Europa, donde a pesar de tener ocho partidos por delante, el margen de error es más pequeño con respecto a LaLiga.
El balance es muy positivo y el tropiezo del Stade Louis II no ensombrece esas buenas sensaciones que ha exhibido el equipo azulgrana en las primeras cinco jornadas ligueras, con pleno de victorias.
El mensaje de Flick al vestuario
Un mensaje muy similar al que Hansi Flick hizo de puertas adentro en el vestuario, aunque no estuvo exento de autocrítica. Mantuvo la confianza en los jugadores, les transmitió su satisfacción por la actitud mostrada y les instó a hacer análisis cada uno sobre lo que hizo bien y lo que no hizo tan bien.
El técnico valora muy positivamente que el próximo partido llegue inmediatamente, sin tiempo para que las malas sensaciones se enroquen y, en cambio, un escenario perfecto para reaccionar rápido, como es el estadio de La Cerámica y ante un gran rival como el Villarreal, que todavía no sabe lo que es perder en este campeonato hasta la fecha, con un bagaje de tres victorias y dos empates.
Ayer, a la llegada de Mónaco, el equipo se ejercitó en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí, en una sesión de recuperación para los titulares y con más carga para los suplentes y los que no jugaron.
Hoy, a partir de las 11 de la mañana, el Barça volverá al trabajo, con muy poco margen, para preparar el asalto al Estadio de la Cerámica, donde espera uno de los tres inmediatos perseguidores en la clasificación de LaLiga.
Con los deberes hechos
Flick ya podrá detallar a sus jugadores los errores a corregir de la derrota cosechada en el estreno de la Champions en Mónaco. De hecho, a su regreso de la capital monegasca, los ayudantes de Flick aprovecharon el vuelo para revisar con detenimiento el partido ante el AS Monaco y tomar buena nota de las cosas que el equipo debe mejorar.
El mensaje es claro: tranquilidad pero toca no repetir errores.
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