También en Nürburgring, la convivencia entre coches y motos puede ser un desafío
En el mítico circuito de Nürburgring, Alemania, donde se conjugan velocidad y adrenalina, la convivencia entre coches y motos se ha convertido en un tema de debate. A pesar de ser un lugar donde los amantes del motor pueden disfrutar de las emociones más intensas, la coexistencia pacífica entre vehículos de cuatro y dos ruedas puede ser un desafío diario. La seguridad en la pista es fundamental para evitar accidentes y garantizar la diversión de los pilotos y pasajeros. En este sentido, es importante analizar las medidas de precaución y respeto mutuo que se deben tomar para que la experiencia en Nürburgring sea inolvidable para todos.
Convivencia en alta velocidad: un Porsche y una Ducati se acaban de rozar en Nürburgring
Los que sufren de los rigores de la circulación urbana en su día a día saben que en muchas ocasiones la convivencia entre motos y coches no es fácil. En algunas situaciones porque hay más de un motorista que se pasa de listo, pero en la mayoría de las veces porque hay muy poco respecto por los motoristas, en líneas generales.
El problema es cuando estas coyunturas se trasladan a un circuito como Nürburgring Nordschleife y se dan a altísima velocidad. Conocido también como 'Infierno Verde', Nürburgring Nordschleife es un auténtico lugar de peregrinación para los aficionados del mundo del motor. Al final, es un trazado de más de 20 kilómetros con una historia increíble y que además se mantiene abierto para el gran público cuando no hay pruebas deportivas o alguna sesión de test de fabricantes de coches y motos.
Por un módico precio, cualquiera puede dar al menos una vuelta a tan icónica pista, con todo lo que ello conlleva.
Un susto a 180 km/h
La muestra de lo que decimos es el vídeo adjunto, en una reciente tanda en Nürburgring Nordschleife, en la que se rozó la tragedia. Y es que un Porsche 718 GT4 RS y una Ducati Panigale V4 estuvieron a centímetros de tocarse en una de las partes más rápidas de todo el circuito, cuando ambos vehículos rodaban a unos 180 km/h.
Y es que al igual que pasa en el tráfico urbano, en las sesiones de 'Tourinstenfahrten' -tandas de turistas- no se puede despistar uno ni un segundo.
Filmado desde el interior de otro Porsche, la maniobra hiela la sangre. Y es que Erik, pues así es el nombre del conductor del Porsche 718 GT4 RS, de repente se encuentra con la Panigale V4 en plena trazada al abrirse el piloto de la Ducati, como es lógico, tras buscar el ángulo de la curva.
Por suerte, Erik logra esquivar la moto italiana y haciendo gala de unos grandes reflejos evitar el accidente, aunque para ello mete su deportivo por la hierba.
Sin entrar en quién de los pilotos tiene una mayor incidencia en este percance, la verdadera victoria es que ninguno de los dos resultó herido y que más allá del paso por la hierba, ni el Porsche 718 GT4 RS ni la bella Ducati Panigale V4 sufrieron daños.
Eso sí, este vídeo es la mejor muestra de que tanto en un circuito, como en una carretera o en las calles de tu ciudad, siempre hay que estar alerta ya que cualquier cosa puede pasar cuando menos te lo esperas.
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