El misterioso desaparecimiento de Robert Navarro, un joven empresario de 32 años, sigue siendo un enigma sin resolver después de varios años de investigaciones y especulaciones. La noche del 10 de octubre de 2015, Navarro salió de una reunión de negocios en el centro de la ciudad y nunca más se supo de él. Las autoridades han seguido varias pistas y líneas de investigación, pero hasta la fecha no han podido esclarecer los motivos y circunstancias de su desaparición. El caso ha generado un gran interés público y ha sido objeto de numerosas especulaciones y teorías, pero la verdad sigue siendo un misterio.
Quedan solo 10 días para que se cierre el mercado de fichajes y uno de los asuntos que quedan por resolver es la situación de Robert Navarro en la Real Sociedad. Aunque no es quizá el que más preocupe y ocupe al club txuri urdin en estos momentos, considerando que todavía no ha traspasado a Merino y quedan un central y un delantero centro por contratar, es un quebradero de cabeza constante y de difícil solución.
Una especie de callejón sin salida. Hace unos días trascendió el interés del Espanyol en él, pero hay otros cuatro equipos de Primera interesados en hacerse con sus servicios: Celta, Alavés, Leganés y Getafe, según informa Radio Marca Donosti. Sin embargo, ninguno está dispuesto a abonar lo que pide la Real por él.
La cesión no es una opción que contemple el club txuri urdin por ahora porque Navarro termina contrato en 2025, no quiere renovar y su intención es la de recalar gratis en el Athletic el año que viene. Y a que se repita ese escenario, como sucedió con Gorosabel, no está dispuesta la Real.
Navarro sigue ejercitándose con normalidad con el resto de jugadores de la Real en Zubieta, pero sin posibilidades de jugar porque ni tiene ficha, ni tiene dorsal y ni siquiera disputó los amistosos. Él mismo fue quien decidió no participar en el 'Vídeo Day' de LaLiga con todos los jugadores -lo hicieron, por ejemplo, Mikel Merino y Carlos Fernández- y vio in situ el encuentro del pasado domingo ante el Rayo Vallecano, pero no en el palco reservado a los jugadores del primer equipo -donde estaban Zubeldia, Zakharyan, Odriozola y Fraga-, sino desde la grada, entre los aficionados en la Tribuna Principal.
Así las cosas, o cambian las posturas de unos u otros, o el futbolista y el club están abocados a una situación poco gratificante: año en blanco del futbolista y necesidad de pagar una ficha por parte del club sin que ese jugador aporte nada.
La situación de Robert Navarro en la Real Sociedad es un misterio que preocupa al club txuri urdin y que debe ser resuelto cuanto antes.
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