Este síntoma nocturno puede ser el indicador de tres tipos de cáncer que no se pueden descartar

En el ámbito de la salud, la detección temprana de los síntomas es crucial para prevenir y tratar con éxito enfermedades graves como el cáncer. En este sentido, un síntoma nocturno puede ser el indicador de tres tipos de cáncer que no se pueden descartar. Aunque a menudo se asocia con otros trastornos, este síntoma puede ser un signo de alarma que debemos tener en cuenta. En este artículo, exploraremos qué es este síntoma nocturno y qué tipos de cáncer están relacionados con él, con el fin de concientizar y sensibilizar a la población sobre la importancia de la prevención y la detección temprana.

Sudor nocturno: un síntoma sospechoso que puede indicar tres tipos de cáncer

Una de cada seis personas muere de cáncer en el mundo, y en España esta enfermedad está creciendo más de lo previsto. Para 2024 se espera diagnosticar 286.664 nuevos casos, un 2,6% más que en 2023. En el país, la mayoría de los casos corresponde a tumores colorrectales, de mama y de pulmón, el cual se consolida como el tercer tipo de cáncer más frecuente en mujeres, habiendo triplicado su prevalencia en los últimos dos décadas a causa del tabaco.

Este crecimiento en el número de españoles con tumores está generando mucha alarma en la comunidad médica, y ahora se suma un nuevo dato: un particular síntoma nocturno podría ser un indicio de tres tipos de cáncer. ¿Cuál es?

El síntoma nocturno que podría indicar cáncer

El síntoma que puede presentarse por las noches e indicar cáncer es el sudor nocturno. La sudoración es una sustancia líquida originada por las glándulas sudoríparas. El 99% de su composición es agua; el mínimo resto está conformado por sales, en especial, cloruro de sodio, y algunas sustancias excretadas por las glándulas.

El cuerpo necesita sudar para regular la temperatura corporal. Esto se logra a partir de que el sudor impregna la superficie de la piel, se evapora y la evaporación genera frío. Transpirar mientras dormimos podría ser un síntoma preocupante y de relación directa con tres tipos de tumores: leucemia, cáncer de hueso y cáncer de hígado.

Sin embargo, antes de alarmarse hay que tener en cuenta que la sudoración nocturna puede estar relacionada con diversas causas y no necesariamente ser un síntoma asociado al cáncer. En principio, hay que descartar la sudoración nocturna por andropausia, menopausia o calor excesivo de la habitación.

Asimismo, el sudor nocturno puede relacionarse con otras causas, como un proceso infeccioso, problemas metabólicos, de tiroides o glucémicos, un cuadro de ansiedad generalizada, o el consumo de antidepresivos. No obstante, no se debe subestimar ningún síntoma y si sufres de sudores nocturnos lo recomendable es que se lo comentes a tu médico.

Los 3 tipos de cáncer relacionados con la transpiración nocturna excesiva

Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los sudores nocturnos pueden aparecer porque el cuerpo está tratando de combatir el cáncer. Los cambios en los niveles hormonales también pueden ser una causa. Cuando el cáncer provoca fiebre, el cuerpo puede sudar en exceso mientras intenta enfriarse.

Por lo tanto, la sudoración nocturna puede ser un síntoma temprano poco específico de tres tipos de cánceres. ¿Cuáles son?

1. Leucemia: la leucemia es un tipo de cáncer de la sangre que se origina en la médula ósea, lugar donde se forman nuevas células sanguíneas. La sudoración por las noches puede estar asociada con la leucemia cuando los sudores son excesivos, al punto que una persona se despierta empapada de tanto transpirar.

2. Cáncer de hueso: el cáncer óseo primario es un tipo de tumor poco común, que puede manifestar sudoración nocturna, entre otros síntomas.

3. Cáncer de hígado: según el Instituto Nacional del Cáncer, el tumor que se produce en el hígado es el sexto cáncer más común y la tercera causa principal de fallecimiento por esta enfermedad a nivel mundial. El cáncer de hígado puede presentar síntomas como sudoración excesiva por las noches en algunos casos. Este tipo de tumor se presenta con mayor incidencia en regiones como África.

Esta información no sustituye en ningún caso al diagnóstico o prescripción por parte de un médico. Es importante acudir a un especialista cuando se presenten síntomas en caso de enfermedad y nunca automedicarse.