En un día histórico para el deporte, la gimnasta brasileña Rebeca Andrade se coronó con la medalla de oro en la prueba de suelo en los Juegos Olímpicos, mientras que la estadounidense Simone Biles, considerada una de las mejores gimnastas de todos los tiempos, se despidió de la competición con un saldo de tres medallas de oro y una de plata. Esta emocionante jornada dejará un legado indeleble en la historia del deporte y será recordada por años por venir. La actuación de Andrade en la prueba de suelo fue impecable, demostrando su habilidad y dominio en la especialidad. Por su parte, Biles, quien había sido la gran favorita para llevarse el oro en varias pruebas, se mostró satisfecha con su desempeño a pesar de no haber alcanzado todas sus metas.
Rebeca Andrade se alza con el oro en suelo, mientras Simone Biles se despide de los Juegos Olímpicos con tres medallas de oro y una de plata
La brasileña Rebeca Andrade se llevó el oro en la final de suelo en los Juegos Olímpicos de París, después de desplegar toda su magia en el Bercy Arena. La estadounidense Simone Biles, que se presentaba como favorita, quedó segunda, con medalla de plata, y la también americana Jordan Chiles, tercera después de una reclamación.
Simone Biles, que ya había fallado en el calentamiento, empezó su ejercicio con un doble mortal con doble pirueta, pero en dos ocasiones sacó los dos pies del tapiz, lo que le supuso una penalización de seis décimas y una puntuación que solo le alcanzaba para la plata, a pesar de la dificultad.
La brasileña Rebeca Andrade salió a darlo todo, demostrando que es maravillosa. Empezó su ejercicio con un doble mortal agrupado con pirueta, doble plancha con pirueta estelar girando en el segundo mortal, doble mortal extendido, volando sublime, como una mariposa, estupenda, magistral. La brasileña sumaba un extraordinario 14.166 que le valdría el oro.
La italiana Manila Esposito fue la primera en competir, pero cayó de rodillas tras un doble en plancha. Luego, la china Yushan Ou llenó de acordes tradicionales chinos el Arena Bercy, pero se salió en la segunda serie tras un mortal agrupado, carpado, sacando los dos pies fuera de la línea. La japonesa Rina Kishi, de solo 16 años, pequeñita y explosiva, también se salió tras una doble pirueta.
Otras gimnastas como Ana Barbosu, Alice D´Amato y Sabrina Maneca-Voinea también compitieron, pero no lograron superar a las tres primeras. La americana Jordan Chiles, de blanco inmaculado, tomó el suelo para clavar cada movimiento, provocando el aplauso de su compañera Simone Biles. Ahí estaba con el doble en plancha con pirueta que tan bien dibuja y que le valió una puntuación de 13.766 con polémica. Una reclamación permitió a la americana sumar una décima más y entrar en el bronce quitándole la medalla a Ana Barbosu.
Así, Simone Biles cierra los Juegos Olímpicos con tres medallas de oro y una plata, mientras que Rebeca Andrade se lleva el oro en suelo.
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