En una impactante entrevista, Francisco, un español que sobrevivió al desastre en las islas Malvinas, compartió su conmovedor testimonio sobre la lucha por la vida en uno de los episodios más dramáticos de la historia reciente. Con una voz llena de emoción, Francisco relata la tétrica experiencia que vivió junto a otros supervivientes, cuando pensó que ya no iban a ver la luz del día. Su historia es un tributo a la resistencia humana, un ejemplo de cómo el ser humano puede sobreponerse a las más extremas condiciones. A continuación, te presentamos el impactante relato de Francisco, un superviviente que ha marcado la historia.
Tragedia en Alta Mar: Francisco, Superviviente Español, Relata el Horror de Esperar Horas para ser Rescatado
El pasado 22 de julio, el pesquero Argos Georgia naufragó a 170 millas de las islas Malvinas, obligando a su tripulación de 27 personas a esperar a ser rescatada dividida en dos balsas salvavidas. Aguantaron como pudieron durante casi 20 horas, en medio de una tormenta con olas de 8 metros de altura y un mar a 4 grados.
Hubo catorce supervivientes, seis de ellos gallegos, y se recuperaron nueve cuerpos. El resto siguen desaparecidos. Uno de los supervivientes, Francisco Gondar, ha contado su testimonio conmovedor en Espejo Público, apenas unos días después de la tragedia y a pocas horas desde su llegada a España.
Un Testimonio conmovedor
Al borde del llanto constantemente, el marinero ha recordado lo sucedido y explicado cómo se encuentra después de haberse reencontrado con su familia en Pontevedra. He sido bien recibido por mi esposa y mis padres y mi hermana. Y nada más. Con los míos. Se está bien al llegar a casa, poco a poco uno se va poniendo bien, ha comenzado diciendo Francisco, visiblemente afectado.
Durante la entrevista, el pescador ha explicado qué es lo que sucedió con el barco y cómo tuvieron que abandonarlo porque se hundía. Empezó a entrar agua masivamente por el costado de estribor, por el lado derecho (.). Vi por las cámaras que se inundaba. El capitán dio la orden de ponernos el traje de inmersión y nos dirigimos al punto de reunión. Y nada, el capitán comunicando con el jefe de máquinas vieron que no se podía solucionar y dieron la orden de abandono, ha explicado el marinero.
La Espera Angustiosa
A pesar de contar con trajes de inmersión, el rescate llegó más tarde de lo que esperaban y todos entraron en un estado de hipotermia. Teníamos los trajes, pero todo tiene un límite, ha asegurado Francisco, que ha confesado que unas dos horas antes del rescate, comenzó a pensar que no sobrevivirían. A las 18 horas o así pensé que nos íbamos porque no llegaba el barco que tenía que rescatarnos. Yo sabía que venía un barco porque el patrón de pesca hizo un trabajo estupendo y avisó por teléfono a la armadora para que movilizaran todo, aparte de avisar a salvamento. Sabía que venía ese barco, pero ahí pensé que nos íbamos. Tardaron porque primero fueron a la otra balsa. A nosotros nos vino la patrullera, que vino un poco más tarde, ha relatado el superviviente.
Durante esas horas, Francisco pensó prácticamente todo el rato en su hijo pequeño. Y no pudo hacer nada más: el frío se lo impedía. Ni siquiera pudo beber agua, a pesar de que tenía muchísima sed. Quien sí estuvo activo y dando órdenes fue el capitán de la tripulación. Hizo un esfuerzo brutal ese hombre (.). Los rusos, como eran fuertes, eran los que hacían las cosas. Son gente de cubierta muy fuerte y muy dura, ha comentado en Antena 3.
La Suerte de Francisco
Dentro de la tragedia, Francisco tuvo la suerte, en palabras de él, de que no falleció ninguno de los compañeros de su balsa. No ocurrió lo mismo con el otro grupo, en el que solo hallaron a un superviviente. Ese chico tuvo que pasar un infierno.
Al marinero se le ha quebrado la voz también al recordar a uno de los fallecidos, el patrón de pesca: Fue él quien me introdujo en la empresa. Él apostó por mí.
Francisco ha compartido su testimonio conmovedor, destacando la buena labor que hicieron sus compañeros de tripulación y la suerte que tuvo de sobrevivir a la tragedia.
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