Lo que duele en Bilbao
En el corazón del País Vasco, Bilbao, ciudad emblemática y turística, se vive una situación crítica y preocupante. A pesar de ser un destino favorito para muchos viajeros, la ciudad enfrenta problemas estructurales y sociales que no pueden ser ignorados. La inseguridad ciudadana, la contaminación ambiental y la desigualdad económica son solo algunas de las cuestiones clave que afectan la calidad de vida de sus habitantes. En este artículo, analizaremos en profundidad los problemas que duele en Bilbao, y exploraremos las soluciones posibles para abordar estos desafíos y hacer de esta ciudad un lugar más seguro, sostenible y justo para todos.
La ofensa en Bilbao no es la ficha, sino la falta de respeto y transparencia en la negociación
No, lo que molesta en Bilbao no es que un club, en este caso el Barça, quiera fichar a Nico Williams. Es lógico que un equipo de la talla del Barcelona tenga interés en un jugador talentoso como el extremo rojiblanco. Después de todo, el pez grande se come al chico, y es ley en el fútbol y en la vida.
Sí han molestado, y mucho, las palabras de Laporta haciendo alusión directa a un futbolista con contrato en otro club. Sorprenden porque no es algo que se estile ni en el Athletic ni en casi ninguna entidad. Sin embargo, el modo de funcionar del presidente culé es muy distinto al del resto.
Del mismo modo que son incomprensibles las palabras de Tebas. Para explicar que el Barça puede fichar a un jugador por 58 millones de euros, y aunque se lo hayan mencionado directamente en la pregunta, no hace falta que el entrevistado verbalice su nombre. Queda bastante feo siendo el presidente de la Liga. Es hacer de menos a uno de los clubes a los que representa.
Tampoco molesta que el Barça intente regatear el precio de la cláusula. Es lo normal, es lícito. Pero sí que maree la perdiz. Básicamente porque en Bilbao hacemos las cosas más sencillas. ¿Te interesa? Vienes, pagas y, si es la voluntad del futbolista, se marcha contigo, nos damos un apretón de manos y agur. El Chelsea no se anduvo con rodeos con Kepa, tampoco lo hizo el Manchester City con Laporte ni el Bayern con Javi Martínez. El asunto es sencillo. Con poner un mínimo de ganas, se entiende.
La verdadera ofensa no es la intención de fichar a Nico Williams, sino la falta de respeto y transparencia en la negociación. Es la falta de consideración hacia el Athletic y su jugador. Es el modo en que se han llevado las cosas, sin tacto ni delicadeza. Eso es lo que molesta en Bilbao.
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