En un día lleno de emociones en el circuito de Miami, el piloto neerlandés Max Verstappen sufrió un contratiempo en la sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Miami. Al intentar tomar una curva, el piloto de Red Bull perdió el control de su monoplaza y dañó el suelo de su vehículo, lo que podría afectar su desempeño en la competencia. Afortunadamente, Verstappen salió ileso del incidente, pero su equipo tendrá que trabajar arduamente para reparar los daños antes de la carrera. Esta noticia ha generado gran expectación entre los fanáticos de la Fórmula 1, quienes esperan con ansias ver cómo se desarrolla la competencia en el circuito de Miami.
Verstappen, sin ritmo: daño en su monoplaza Red Bull en Miami
Lando Norris se llevó la victoria en el Gran Premio de Miami de Fórmula 1, gracias a una oportunidad que se presentó en el momento justo, pero también debido a que el inglés mostró más ritmo que Max Verstappen, quien no pudo dar caza a Norris.
La pregunta que queda es si lo ocurrido en Miami fue representativo de lo que resta de la temporada y si McLaren puede considerarse un aspirante a más triunfos. Para responder a esta pregunta, tendremos que esperar a la próxima carrera en Imola.
En Miami, la nula degradación de los neumáticos hizo que uno de los principales puntos fuertes del Red Bull no marcara diferencias respecto a sus oponentes. Sin degradación, los McLaren y Ferrari estuvieron cerca de Verstappen, sin que el neerlandés pudiera distanciarse al inicio de la carrera.
Verstappen no se sintió cómodo con su Red Bull
Max Verstappen dejó claro que no se había sentido cómodo con su coche durante todo el fin de semana. Nunca me sentí cómodo durante todo el fin de semana. Creo que con el neumático medio estaba bien, pero con el duro era un desastre. Es decir: poco agarre, un equilibrio muy complicado a baja velocidad. no podía apoyarme en la parte trasera mientras que a alta velocidad subviraba mucho.
Verstappen argumentó que no podía equilibrar su coche debido a los problemas de agarre y subviraje. Así que sí, sólo pilotaba con el agarre que tenía y no era mucho, agregó.
En ese momento, justo después de la carrera, Verstappen no creía que su falta de ritmo tuviera que ver con el golpe que dio a su coche al salirse de la pista en la vuelta 22, cuando se llevó un bolardo por delante.
Un daño en el suelo del coche
Sin embargo, Christian Horner, jefe del equipo, corregía a su piloto y dejaba claro que ese golpe había dañado el suelo de su Red Bull y le había perjudicado en carrera.
No creo que hayamos tenido un gran equilibrio en todo el fin de semana. Obviamente, golpeó el bolardo alrededor de la vuelta 20 y eso ha dañado bastante los bajos del coche, así que tendremos que ver exactamente cuál ha sido el efecto, dijo Horner.
Verstappen admitió posteriormente que el suelo del coche estaba dañado y tenía un agujero en el que se podría haber levantado al golpear el cono.
La pregunta que queda es si el mal ritmo de Verstappen de este fin de semana fue debido al golpe con el bolardo o porque su Red Bull no era superior en Miami. Las próximas carreras responderán a esa pregunta.
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