La Copa de África se vuelve cada vez más complicada para Williams
La situación del equipo de fútbol de Ghana, liderado por el entrenador Williams, se vuelve cada vez más complicada en la Copa de África. Después de una serie de partidos decepcionantes, el equipo se encuentra en una situación crítica, con pocas oportunidades de avanzar a la siguiente ronda. La presión sobre el entrenador y los jugadores es cada vez mayor, ya que la expectación del público y los patrocinadores es muy alta. La próxima cita del equipo será clave para determinar su futuro en el torneo.
Williams y Ghana encadenan decepciones en la Copa de África
Lejos de levantar cabeza, Ghana va de mal en peor. Ha perdido a domicilio con la modesta Sudán (2-0), en un partido celebrado en Libia, y tiene pie y medio fuera de la Copa de África que tendrá lugar en Marruecos entre diciembre de 2025 y enero de 2026.
Iñaki Williams sí ha sido titular esta vez y ha completado los noventa minutos en el verde, aunque nada ha podido hacer. Es una selección completamente rota y deslavazada que encadena decepciones. Y es que abrió 2024 quedando apeada en la fase de grupos de la pasada Copa de África.
Ghana no ha ganado ninguno de los cuatro encuentros de la fase de clasificación. Luce un paupérrimo 2 de 12, algo impropio para un combinado en el que estaban el propio Williams, Salisu (Mónaco), Djiku (Fenerbahçe), Semenyo (Bournemouth), Nuamah (Lyon) o Kudus (West Ham).
Matemáticamente ya no pueden alcanzar a Angola y Sudán se encuentra cinco puntos por encima a falta de las dos jornadas que restan para la ventana de noviembre. Las ‘Black Stars’ viajarán a Angola y recibirán a Níger. Deben ganar sus dos envites y que Sudán pierda ambos. Todo lo que no pase por ahí supondrá una eliminación histórica, no se queda fuera de una Copa de África desde 2004.
Williams ha sido la única novedad en el once de Otto Addo con respecto al choque del jueves. Ha ejercido de única referencia en punta, como es habitual en Ghana. Sudán ha dado tres avisos en el primer cuarto de hora que hacían presagiar el fatal desenlace.
El delantero del Athletic ha estado desconectado del juego, más de espaldas que recibiendo balones al espacio. Sin explotar sus virtudes. Lo ha intentado con un cabezazo, en posición forzada, que no ha cogido puerta.
La sensación de Ghana es que es un conjunto atacado de los nervios, con poca continuidad en su juego. Hasta Iñaki se ha visto inmerso en una ligera tángana antes del descanso. Se intuía una tímida reacción en el comienzo del segundo periodo. Williams ha marcado en un córner, sin embargo estaba en fuera de juego. Todo ha sido un espejismo para los de Addo, ni siquiera con el ingreso del veterano Jordan Ayew han logrado tomar el mando de las operaciones.
Ghana ha ido dando pasos al frente y ha desprotegido su espalda, lo que ha aprovechado Sudán para castigar con dureza. Los locales han avisado primero en una clara contra y, poco después, han asestado dos golpes consecutivos sobrepasada la hora de juego en dos transiciones de vértigo. Mahmoud y Abdel Rahman han decantado la balanza, goles celebrados como si hubieran ganado el Mundial. No era para menos.
De ahí al final, 25 minutos de pura desesperación ghanesa y nulo fútbol. Williams pudo recortar en una volea que se le marchó desviada. La Copa de África es casi un imposible para las ‘Black Stars’.
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